La Unidad Territorial de Costas (UTC) de Porto Cristo ha detenido a un hombre sobre el que pesaba una orden de ingreso en prisión por haber violado varias veces a su hijastra en Manacor. El acusado fue condenado por la Audiencia de Palma a 18 años de cárcel por dos delitos continuados de abusos sexuales, pero seguía en libertad porque su abogado recurrió el fallo al Tribunal Supremo.

Los hechos se remontan al año 1998, cuando la víctima tenía siete años. La Audiencia Provincial declaró probado que el acusado solía quedarse al cuidado de la niña, cuando la madre iba a trabajar, en el domicilio familiar de Manacor. El hombre aprovechaba esos momentos para someter a la menor a abusos sexuales. La obligó a ver películas pornográficas, la sometía a tocamientos e incluso la forzó a mantener relaciones sexuales a lo largo de tres años, hasta que la niña se decidió a contar lo que estaba ocurriendo.

El hombre siempre negó los hechos y achacó las acusaciones a una venganza de su hijastra por haber sido demasiado severo con ella. Sin embargo, la Audiencia Provincial de Palma dio plena credibilidad al testimonio de la niña y condenó al acusado a 18 años de prisión por dos delitos continuados de abusos sexuales.

La sentencia, dictada en noviembre del año pasado, no supuso el encarcelamiento del hombre, ya que su letrado recurrió el fallo ante el Tribunal Supremo.

El abogado alegó, entre otras cuestiones, que el relato de la víctima no era creíble y que, en todo caso, la pena impuesta por el delito era desproporcionada. Sin embargo, el Alto Tribunal rechazó la tesis del letrado y confirmó la sentencia de la Audiencia de Palma.

La Unidad Territorial de Costas (UTC) recibió el 1 de diciembre una orden de ingreso en prisión contra el condenado, por lo que los agentes lo localizaron y lo detuvieron antes de trasladarlo al centro penitenciario para que cumpla la condena.