Una pareja fue juzgada ayer en la Audiencia de Palma por desvalijar un chalé de la urbanización Badia Gran, en Llucmajor, a finales de 2009. Los dos acusados, un hombre de origen venezolano y una mujer colombiana, negaron los hechos y se desvincularon del robo. El varón imputado, además, está acusado de un delito contra la salud pública por presuntamente dedicarse a traficar con cocaína en Palma. El sospechoso descartó también estos cargos y alegó que la droga que encontró la Guardia Civil en el registro en su casa, cuatro gramos de cocaína y otros ocho de cannabis, era para su propio consumo.

La fiscalía solicita para él penas que suman nueve años y medio de cárcel, mientras que para la mujer reclama una condena de tres años y medio de prisión.

El robo en el domicilio se produjo el pasado 13 de noviembre de 2009, después de que los dos imputados forzaran la persiana de una ventana, según la fiscal. Supuestamente se apoderaron de un teléfono y cuantiosas joyas. Al día siguiente, la mujer fue a una tienda a vender las alhajas. La acusada dijo que las joyas eran suyas. En su coche se encontró un reloj robado, pero la sospechosa dijo que hacía de taxista y que se lo habría dejado algún pasajero.