El empleado de seguridad del hotel Ushuaïa de Platja d´en Bossa que en la noche del 19 de agosto asestó al camarero Abel Ureña un puñetazo mortal no se llama José Pereira Sousa. Su nombre verdadero es Paulo Baptista y tiene dos condenas pendientes, que suman 9 años de cárcel, en Portugal por pertenencia a una red mafiosa que actuaba en locales de ocio y de prostitución. Así lo confirmó ayer la Policia Judiciaria portuguesa al periódico Correio da Manhá. Los investigadores españoles se habían puesto en contacto con las fuerzas de seguridad lusas para encontrar a Pereira Sousa. No hallaron a nadie con ese nombre pero dieron con su identidad real. La única diferencia entre Pereira y Baptista es el color de los ojos, por lo que se sospecha que llevaba lentillas azules.