La pequeña Ainhoa vivía a caballo entre Andratx, donde reside tanto sus abuela y bisabuela materna como varios familiares de su padre, y Palma, donde pasaba los fines de semana en el domicilio del Coll den Rebassa donde se produjo la presunta agresión. Pese a que entre semana vivía con sus abuela y estaba escolarizada en Andratx, la madre seguía teniendo oficialmente su custodia. Precisamente, el compañero sentimental de la madre, Miguel Ángel G.L., manifestó tras ser detenido que la abuela había manifestado su intención de quedarse con la custodia.

La madre se llevó a la niña con ella el pasado 8 de junio y no se la había llevado a su abuela la semana siguiente, por lo que llevaba ya unos diez días con ella y no había ido a escuela la semana pasada. Esta conducta tampoco fue considerada irregular, ya que el curso escolar está a punto de finalizar.