Un grupo de bomberos de Palma ha puesto en marcha una campaña para ayudar a la viuda y el hijo de dos años de Alejandro Ribas, el compañero que falleció durante la extinción de un incendio en agosto pasado. El llamamiento explica la "precaria" situación económica que atraviesa la familia, ya que se ha denegado a la mujer la pensión de viudedad pese a acreditar cinco años de convivencia y Cort todavía no ha abonado los 30.000 euros del seguro de vida.

En su escrito, la Associació Cultural i Esportiva del Cos de Bombers de Palma relata que la compañera de Ribas está actualmente en paro y que no ha recibido ayudas oficiales. Por eso, los bomberos apelan a la solidaridad ciudadana para recaudar fondos que ayuden a la familia a "reflotar sus vidas para volver a empezar".

Los donativos pueden ingresarse en la cuenta bancaria abierta para esta campaña (2051 0088 62 1070013142) y los bomberos piden además que se extienda el llamamiento. "Iniciamos este proyecto solidario de apadrinamiento con la certeza de que la respuesta de todos sobrepasará las fronteras de nuestros parques", explica el comunicado.

Alejandro Ribas murió, a los 34 años, en la tarde del 6 de agosto pasado cuando participaba en la extinción de un incendio declarado en un bar de la calle Andreu Feliu. Fue el primer miembro de los Bombers de Palma fallecido en acto de servicio.