Un buceador de 56 años que desapareció ayer tarde en Pollença mientras realizaba una inmersión a pulmón libre fue hallado finalmente en buen estado, según informó el Servicio de Emergencias del 112.

Los familiares dieron la alerta en torno a las siete de la tarde. La extrema tardanza del buceador en regresar a la playa de Cala Barques les despertó la alarma. Al no divisar por ningún lado al buceador, telefonearon al Servicio de Emergencia del 112.

Efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil y buceadores del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) del Instituto Armado se movilizaron de inmediato hasta el lugar señalado. Los expertos empezaron a peinar la zona, mientras la luz se lo permitió, en busca del buceador. Asimismo, una dotación de Salvamento Marítimo se desplazó hasta Pollença en busca de algún indicio del desaparecido, para colaborar en las labores de rastreo.

A pie de playa

Mientras tanto, los familiares del submarinista esperaban a pie de playa tener alguna noticia de él. Lo prolongado de la inmersión les tuvo en vilo. Finalmente, todo quedó en un susto y el submarinista apareció ayer a última hora de la tarde en buen estado de salud.