La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma ha dictado en un auto en el que indica que procede continuar la investigación por falsedad documental contra el presidente del Consell de Ibiza, Xico Tarrés (PSOE), en el caso de presunta corrupción urbanística Eivissa Centre.

En la resolución, remitida hoy por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares, se estiman los recursos de apelación presentados por la Fiscalía y por el ex secretario general del PSOE pitiuso, Roque López, contra el auto del Juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza del pasado 16 de febrero.

Ese día, el juez decidió levantar la imputación por falsedad documental contra Tarrés en la causa que investiga este presunto caso de corrupción urbanística en Ibiza.

Así, la Sección Segunda ha revocado en parte esta decisión judicial, en el sentido de que "ha lugar a continuar la investigación" contra el presidente del Consell por si "pudo haber incurrido en un delito de falsedad en documento público" en el otorgamiento de una escritura de obra nueva en 2005, que expidió como presidente de la entidad ITUSA.

Este caso en fase de instrucción deriva de la querella interpuesta por Roque López en la que acusa al anterior equipo de gobierno del ayuntamiento de Vila (PSOE), del que Tarrés era alcalde, de irregularidades en el proyecto Eivissa Centre de remodelación del centro de la ciudad.

Tarrés, actual presidente del Consell y diputado autonómico, era en el momento de los hechos presidente de la sociedad mixta ITUSA, promotora de la obra.

El presidente del Consell otorgó la escritura de declaración de obra nueva del edificio Joan XXIII -a la que hace referencia el auto de la Audiencia- el 1 de diciembre de 2005, faltando, según el querellante, a la verdad de los hechos.

El abogado de López sostiene que Tarrés habría declarado ante notario que el edifico de Joan XXIII sólo constaba de 36 viviendas cuando ya se habían construido 160.

Presuntamente, en el momento de esta declaración el Plan General de Vila no permitía una obra de esta envergadura, motivo por el que se habría ocultado el alzado real de edificio.