Los Bombers de Palma y de Mallorca pasaron todo el día de ayer intentando sofocar un incendio declarado en un enorme vertedero de una empresa de reciclaje, donde se acumulaban toneladas de ramas y hojas, en Son Reus. Fue necesario retirar todos los restos de poda que allí se acumulaban para remojarlos, labor que comenzó de madrugada y que ayer por la noche todavía proseguía. En la extinción participaban varias excavadoras, cubas de Emaya y un helicóptero del Ibanat.

El fuego se detectó hacia las seis y media de la mañana en un enorme agujero de 40 metros de largo, 40 de ancho y 25 de profundidad, donde una empresa dedicada al reciclaje acumulaba numerosas toneladas de los restos de podas que ayuntamientos de toda la isla depositan allí. Decenas de efectivos de los Bombers de Palma y de Mallorca y agentes de la Policía Local acudieron al lugar y comprobaron que el incendio había generado una densa humareda, visible a varios kilómetros de distancia, pero que no era grave ni ponía en riesgo al resto de instalaciones de la empresa.

Aunque las llamas quedaron controladas en apenas una hora y media, según explicaron fuentes de los bomberos, los trabajos se alargaron durante toda la jornada. Era necesario retirar y remojar todos los residuos para evitar que el incendio se avivara, por lo que la extinción muy lenta y laboriosa.

Más de doce horas

Los bomberos solicitaron la presencia de varias excavadoras para que retirasen la gran cantidad de hojas, ramas y otros restos acumulados, que en las zonas más profundas estaban muy compactos. Además, ocho cubas de Emaya y dos cisternas de los Bombers de Palma suministraron agua durante toda la jornada a los efectivos de extinción y un helicóptero del Ibanat realizó varias descargas sobre el vertedero para agilizar los trabajos, que se prolongaron

Las labores de extinción se prolongaron durante más de doce horas y estaba previsto que continuaran a lo largo de la noche, por lo que los bomberos instalaron varios focos en el lugar, añadieron las mismas fuentes.