Agentes de la Policía Local de Palma arrestaron el pasado domingo a un ecuatoriano de 39 años, identificado como Fermando Mauricio T.G., como presunto autor de un delito de violencia de género, después de que presuntamente golpeara a su mujer. La víctima, también ecuatoriana de 39 años, explicó posteriormente que no era la primera vez que su marido la maltrataba, y que lo hacía porque ella había "cambiado de religión".

Fuentes de la Policía explicaron que los hechos ocurrieron poco después de la medianoche del domingo, en un domicilio de la calle Milán, en Palma. La central del 092 recibió varias llamadas de vecinos alertando sobre una presunta agresión en una vivienda. Los agentes llegaron allí y llegaron a oír ruidos de golpes a través de la puerta. Cuando llamaron y se identificaron como policías, un hombre gritó desde el interior: ¡Márchense, aquí no hay nadie!".

Los policías estaban a punto de derribar la puerta cuando una mujer les abrió. En ese momento, el hombre se metió en una habitación. La víctima, muy nerviosa, les explicó que su marido la había golpeado porque ella había "cambiado de religión".

Según dijo, hacía un tiempo que se había convertido en testigo de Jehová, y desde entonces su marido la sometía a malos tratos. En esa ocasión, había comenzado a discutir, de nuevo por su cambio de religión, por lo que ella sae había refugiado en la habitación de sus hijas, de 8 y 10 años, pero él había roto el pestillo y había entrado en el cuarto. Las niñas, que estaban muy asustadas, corroboraron la versión de su madre.

Ante las evidencias de un presunto delito violencia en el ámbito familiar, los agentes de la Policía Local procedieron a la detención del hombre.