Un juzgado de Palma condenó ayer a penas que suman un año y medio de prisión a tres jóvenes regatistas rusos que forman parte de la tripulación de la embarcación Valars, que compitió hace pocos días en la 28ª Copa del Rey de vela en Palma, por un delito de resistencia, ya que se enfrentaron a ocho policías a finales de julio en el Paseo Marítimo. Los deportistas de elite, identificados como Roman K., Nikita K. y Denis R., confesaron ser los autores de los hechos y se conformaron con sendas penas de medio año de cárcel.
El magistrado del juzgado de lo penal 4 de Palma, Juan Manuel Sobrino, dictó sentencia ´in voce´. El juez les impuso seis meses de prisión por un delito de resistencia, así como una multa por varias faltas de lesiones. Además, los acusados, defendidos por el letrado Alberto García, deberán indemnizar a los agentes por las heridas que les causaron. La cantidad total asciende a más de 2.800 euros.
El juicio tuvo una gran expectación y varias televisiones rusas cubrieron la noticia. El cónsul del Consulado General de Rusia, Yuri Kovalko, también estuvo presente y destacó el buen trabajo del abogado. Kovalko calificó de "muy bueno" el acuerdo alcanzado.
De madrugada
Los hechos ocurrieron el pasado 29 de julio de madrugada en el Paseo Marítimo, junto a una conocida discoteca de Palma. Una patrulla de la Policía Nacional se percató de la presencia de tres jóvenes en actitud sospechosa y procedió a identificarles. Según la fiscalía, todos ellos se hallaban en un gran estado de excitación y alboroto. Cuando los agentes se acercaron a ellos y les pidieron la documentación, los sospechosos reaccionaron de forma violenta y la emprendieron a golpes contra la Policía. Según la acusación, los agentes recibieron patadas y puñetazos y tuvieron que pedir refuerzos a otros compañeros ante la violencia que emplearon los jóvenes, que compiten en la clase Transpac 52, considerada como la Fórmula 1 del mar.
Uno de los acusados pudo ser reducido en el lugar de los hechos, mientras que otro fue alcanzado en la otra acera del Paseo Marítimo cuando trataba de huir. El tercer sospechoso consiguió fugarse, pero horas más tarde fue localizado y detenido en la zona de Son Armadans. El joven trató de ocultarse en un chalé, tras saltar por un muro e introducirse en un jardín.
