Un hombre se entregó ayer por la mañana en los juzgados de Vía Alemania de Palma después de que presuntamente se fugara el día anterior de los calabozos del cuartel de la Guardia Civil de Palmanova, donde permanecía en calidad de detenido. Se trata de un ciudadano argelino, de ascendencia francesa e identificado como M.B., que supuestamente cometió un hurto en grado de tentativa en la zona de Calvià.

El sospechoso acudió ayer, sobre las diez y cuarto de la mañana, al juzgado de guardia de Palma y explicó que se había escapado el día anterior, el jueves, de una celda del cuartel de Palmanova. Según su versión, abrió el cerrojo de los calabozos con la ayuda de una chancla y salió del edificio sin que nadie reparara en él. El hombre indicó que se sentía muy arrepentido por lo ocurrido y que por ello había decidido entregarse a la Justicia.

En un primer momento y tras personarse en las dependencias judiciales, el hombre fue custodiado en los calabozos de los juzgados por varios agentes. Acto seguido, fue conducido al juzgado de instrucción número 10 de Palma, en funciones de guardia, donde se realizó una comparecencia. Finalmente, varios investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil desplazados expresamente al lugar se hicieron cargo del sospechoso y lo trasladaron en un coche hasta la Comandancia.

Mitad de semana

El presunto delincuente, M.B., de mediana edad, fue detenido a mediados de esta semana por la Policía Local de Calvià por un hurto en grado de tentativa. Los agentes lo entregaron a la Guardia Civil y traspasaron las diligencias al mismo cuerpo. Una abogada asistió al arrestado en el cuartel de Palmanova el pasado jueves por la mañana. Horas después, presuntamente se fugó de su celda.

El sospechoso confesó que se escapó al sacar la mano y parte de un brazo por la ventana de la celda. De esta manera y ayudado con una chancla, consiguió correr el pestillo de la puerta y abrir el cerrojo, siempre según su versión. Luego, salió tranquilamente por las dependencias del cuartel hasta llegar a la calle. El hombre también detalló que nadie le dijo nada mientras caminaba hacia el exterior. Finalmente, se arrepintió y se entregó a la Justicia.