La joven de 19 años que permaneció retenida contra su voluntad durante dos meses en Centelles (Barcelona) como venganza por haber roto con su novio salió ayer del hospital de Manresa, donde se encontraba ingresada desde el pasado fin de semana, cuando fue liberada por los Mossos.

El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Vic (Barcelona) en funciones de guardia prorrogó ayer la detención de los cinco arrestados el secuestro. A los detenidos les imputan delitos de detención ilegal, lesiones, omisión del deber de socorro, trato degradante, amenazas y coacciones. A uno de ellos, además, le atribuyen un delito de agresión sexual.

Los detenidos presuntamente retuvieron durante dos meses a la chica, de 19 años, la agredieron reiteradamente y uno de ellos la violó. Los agentes la hallaron con el pelo rapado, hematomas en el cuerpo y heridas de arma blanca en las piernas. La joven permaneció atada y tapada con una manta en una caseta de transformadores de luz abandonada.

Según la investigación de los Mossos, la mujer fue retenida por una disputa familiar. Se fue a vivir a la casa de la familia de dos de los detenidos por voluntad propia para estar con su pareja, pero al acabar con la relación, no la dejaron irse.

Los agentes dieron con el escondite donde mantenían retenida a la joven después de iniciar una búsqueda por la zona y localizar a cuatro personas dirigiéndose hacia allí. Al llegar al recinto, encontraron a otra persona y a la mujer en un estado "deplorable", por lo que la que trasladaron al Hospital General de Vic.