Un total de 1,3 millones de personas han resultado lesionadas en un accidente de tráfico en España en la última década, el equivalente a casi el tres por ciento de la población del país, con un repunte desde 2011 del 16 por ciento, sufriendo secuelas de por vida el 70 por ciento de los graves.

Son algunas de las conclusiones del estudio "El impacto de los lesionados por accidente de tráfico en la seguridad vial. Análisis y evolución de una década (2006-2015)", elaborado por la Fundación Línea Directa con la colaboración de la Fundación Española para la Seguridad Vial (Fesvial) sobre 912.000 accidentes con lesiones registrados en este periodo por la Dirección General de Tráfico.

En concreto refleja que mientras el número de fallecidos, 25.000 en este periodo, ha bajado un 59 por ciento, al pasar de 4.104 en 2006 a 1.689 en 2015, el de heridos solo ha disminuido un 6 por ciento al pasar de 143.450 en 2006 a 134.455 en 2015, y además se ha producido el referido aumento del 16 por ciento desde 2011.

El informe destaca que cada año más de 13.000 personas resultan heridas de consideración por culpa de los accidentes de tráfico, que de media sufren catorce días de hospitalización y más de doscientos de rehabilitación, siendo la lesión más habitual el esguince cervical, al constituir el 75 por ciento del total.

A juicio de Fundación Línea Directa de los resultados del informe se refleja que el efecto del carné por puntos se diluye pues en los últimos cinco años los accidentes de tráfico con lesionados aumentaron un 18 por ciento, alcanzando cifras similares -casi 100.000 siniestros- a las de 2006, año de implantación de dicho permiso, y el número de heridos aumentó un 16 por ciento desde 2011.

Según este trabajo los españoles aún no están lo suficientemente concienciados ya que refleja que el 44 por ciento de los niños muertos en accidente de tráfico (90) y el 30 por ciento de los que resultaron heridos graves no llevaban sillita infantil.

Además el 32 por ciento de los fallecidos y el 19 por ciento de los heridos graves no usaba cinturón de seguridad y el 17 por ciento de los motoristas muertos no llevaba casco.

Advierte de que el coste de esta lesividad también es muy alto en términos económicos y recuerda que la factura por las lesiones de los accidentes de tráfico en España asciende a unos diez mil millones de euros anuales, casi el uno por ciento del producto interior bruto español.

Agrega que a ello hay que sumar el coste estimado de los daños materiales, con los que "la factura total de los accidentes de tráfico en España resulta astronómica, ya que podría superar los 13.000 millones de euros anuales".

Las salidas de vía se confirman como los accidentes más peligrosos para la integridad física de las personas, mientras que los alcances traseros son los más habituales y los choques en cadena los que más lesionados causan.

Un hombre joven en un turismo antiguo

El perfil del lesionado en accidente de tráfico es un hombre joven de entre 26 y 35 años, con un turismo antiguo de más de 15 años, que circula por una vía convencional -un tipo de carretera que casi duplica el número de heridos por kilómetro de autopistas y autovías- y que va generalmente en la posición del copiloto.

Aunque los daños corporales son cuantitativamente más habituales entre los automovilistas, los motoristas tienen un riesgo un 44 por ciento mayor de sufrir lesiones en caso de accidente.

La lesividad se concentra más en las zonas costeras, siendo Las Palmas, Pontevedra y Murcia las provincias con más lesionados, situándose en el lado contrario Toledo, Segovia y Zamora, con la mitad de la tasa que la media nacional.

El informe recoge que los accidentes de tráfico son una de las causas de hospitalización más frecuente en España.

Al esguince cervical, que supone el 75 por ciento del total de lesiones, le siguen traumatismos como heridas, contusiones y fracturas, y a más distancia las abrasiones.

La lesividad grave se vincula más a los golpes en la parte frontal del coche y en el lateral derecho debido sobre todo a las maniobras evasivas del conductor o a que el copiloto no va pendiente de la circulación mientras que los daños en la parte trasera y en el lateral izquierdo suelen producir más heridos leves.