El trabajo, el estrés, la rutina, los dolores ocasionados por ello, son aspectos que intentamos minimizar al máximo. Pero a veces es difícil. El yoga se presenta como una alternativa para entender el día a día desde otra perspectiva y, en muchas ocasiones, aporta una sensación de bienestar que aleja de los problemas rutinarios. Pese a ser milenario, el yoga está en auge. La presencia mediática, la reciente pasión de los influencers y famosos por esta práctica o la gran promoción que se le da hacen que esta disciplina física, mental y espiritual sea v ox populi.

En Mallorca también se nota. La formación de monitores e instructores de yoga crece exponencialmente. La Escuela Internacional de Yoga en Mallorca recibe muchas más solicitudes en los cursos de formación que hace un año. "Y lo más significativo es que cada vez es gente más joven. Hace cosa de 10 años todos eran de 40 años para arriba y ahora nos encontramos casos de gente de 21 y 22", explican desde la institución, que este año cuentan hasta con una chica de 19 años entre sus futuros formados. "Ahora ya no es algo complementario, ahora se lo toman como algo de futuro", añaden. En la Escuela Internacional de Yoga no les gusta que se hable de moda. Pese a ser obvio que se ha mediatizado, aclaran que "el yoga hace miles de años que se practica. Siempre se ha practicado. Pero hoy en día estamos en una época en que la información ha abierto muchas puertas. Ya no hay esa idea de que el yoga es místico, new age o de cuatro hippies. Hoy en día está demostrado que es beneficioso para la salud, que puede acceder todo el mundo y que no es una secta".

Marian Duarte, representante de la Delegación de la Federación Española de Pilates en Balears y de la Asociación Balear de Pilates, también cree que se está incrementando el interés por el yoga. Aunque el yoga no es su fuerte y llevan centrándose desde 2006 en formar a instructores de pilates, desde este año forman a expertos en yoga. "De la gente que nosotros hemos formado en yoga todos están trabajando dando clases de esta disciplina", afirma.

Los orígenes del yoga en Mallorca se remontan a casi medio siglo atrás. Mónica Santarelli es la pionera de esta práctica en la isla. "Hace 44 años que llegué a Mallorca y éramos los únicos en la isla que dábamos yoga", explica. Para Santarelli, "hay mucho auge y hay gente muy buena dando clases en la isla, pero hay mucho mentiroso también. Hay gente que se va a la India, hace un curso de un mes y se pone a instruir". La veterana instructora no comprende la exponencial oferta en Mallorca. "Estamos alucinados. En todos los lados se imparte yoga", exclama, "no estoy asustada por la competencia, pero me asombra la cantidad de sitios donde se da yoga, en casa, en polideportivos, y me asusta que la gente se lastime y por culpa de gente no preparada se tome el yoga por lo que no es".

Ahora el yoga ha evolucionado en muchos centros como el Shanta Yoga Manacor. Antònia Román, instructora del centro, explica que "es una práctica que llega a todas las edades y géneros. Es muy amplia. Nos quedamos con los estereotipos, pero va mucho más allá. Trabajas en una globalidad que va mucho más allá de un om o una postura". El centro manacorí también ha notado una demanda creciente. Entre otros motivos, es porque ofrecen yoga no convencional dirigido a nuevos públicos y en plataformas tan dispares como encima de una tabla de surf. "Es muy curioso, porque soy muy purista con el yoga. Yo misma dije va en contra de mis sensaciones, pero en la práctica tienes que aplicar muchos principios del yoga para hacerlo encima de una tabla de surf. Además se añaden los elementos, como el aire, agua, tierra... Está todo allí entre tu tabla, el mar y el cielo. Es muy divertido y me sorprendió la aceptación de la gente", aclara Román.

Un yoga desvirtuado

Uno de los aspectos de los que hablan todos los expertos es si, con este auge, la disciplina ha perdido su esencia. La Escuela Internacional de Yoga en Mallorca cree que no. "El yoga que ha llegado a occidente se ha tenido que adaptar a nuestra manera de vivir. Hay muchos yogas modernos que no tienen nada que ver con el clásico, pero las escuelas que continuamos con la tradición hemos adaptado el yoga a las necesidades de la gente de hoy en día", explican.

Para Antònia Román se está desvirtuando. La instructora lo achaca a la falta de comprensión de lo que es la práctica global del yoga. "El yoga es la conciencia desde una ética de cómo estás contigo y cómo estás con el mundo. Los gimnasios, ni son el espacio, ni es el entorno, ni son las formas. Hay una química que no cuadra. La sensibilidad espiritual, de escucha, de saber estar se desvirtúa", explica en relación a la implementación de clases de yoga en los gimnasios. En relación a este aspecto, la Escuela Internacional de Yoga discrepa: "Hace unos años no había yoga en los gimnasios. Está muy bien porque es una manera de que la gente lo conozca y de normalizarlo un poco. Así llega a más gente".

Mónica Santarelli lo relaciona con el afán recaudador afirmando que "hay cinco yogas auténticos. La gente hace yogas rarísimos. Para mí se ha desvirtuado. Se está desvirtuando para ganar dinero, se está monetizando".

Aunque surjan ciertas discrepancias en torno a la esencia y situación actual del yoga, todos coinciden en los resultados óptimos de la disciplina. "Es aliviante, regenerador y hace mucha prevención en el sistema inmune. Si la gente practicase yoga las consultas no estarían como están", explica Román. La Escuela de Yoga Internacional en Mallorca apunta que "las mejores formaciones de yoga están en occidente, no en la India. Y pasa también con las artes marciales. Porque nos hemos ocupado de continuar con técnicas y anatomía". Marian Duarte comenta que "cualquier práctica que incremente mente y cuerpo en occidente es un reflejo de lo que llevan haciendo en oriente desde hace milenios. Las prácticas van de maravilla y eso habla por sí solo", y añade que "esas prácticas son estilo de vida. No solo eso de voy dos semanas a hacer pilates o yoga. De hecho los médicos lo recomiendan, las técnicas de respiración profunda y de activación del diafragma son altamente recomendable"s.

Vemos yoga en los anuncios de bancos, en los carteles de los supermercados, los famosos hacen propaganda. El yoga es una disciplina ancestral que ha calado de pleno en nuestra sociedad. Ahora, miles de años más tarde, no le resultará muy difícil encontrar un centro donde practicarlo, incluso le facilitarán adaptar el horario. Ahora bien, si es usted un purista del yoga, verá que cada vez más se está diluyendo la franja que separa la originalidad de la innovación. Los tradicionales tatami se han convertido en tablas de surf.