El Ayuntamiento de Sant Josep (Ibiza) ha iniciado un expediente de infracción urbanística por las obras ilegales, valoradas en 1,9 millones de euros, ejecutadas en Villa Titanium, la mansión situada a la altura del kilómetro 4 de la carretera de Sant Josep que el verano pasado inauguró en una fiesta sonada Cathy Lobé, expareja del famoso disc-jockey David Guetta. La vivienda está valorada en unos 30 millones de euros.

La casa, de 900 metros cuadrados (planta baja de 460 metros y sótano de 440), se encuentra en suelo rústico común, aunque la piscina exterior, de 189 metros cuadrados, ocupa parcialmente suelo rústico forestal. La terraza exterior tiene 640 metros cuadrados, con un porche metálico de 300. Además de un anexo de 99 metros cuadrados, debajo de la piscina se ha construido otro sótano de 800 metros con gimnasio, piscina, sala de fiesta y cine.

Los técnicos municipales han constatado, tras una inspección que se hizo el pasado mes de mayo, que Villa Titanium (el nombre coincide con el de una conocida composición de Guetta) cuenta con los siguientes elementos que se exceden de lo autorizado: cambio de uso y reforma de la planta sótano de la vivienda principal (unos 440 metros cuadrados), dos patios abiertos junto al edificio de 73 y 150 metros cuadrados, la ampliación de la terraza de la zona de la piscina (640 metros cuadrados) y un porche (300 metros cuadrados). Además, han detectado un cambio de uso y reforma de la planta sótano de la piscina (800 metros cuadrados), la ampliación de una rampa de entrada a esta última zona de la mansión (160 metros cuadrados), cuatro camas balinesas y la modificación de los caminos previstos en el proyecto, algunos pavimentados.

Sótano: sólo máquinas y almacén

Tras la concesión del final de obra, a finales de 2013, el Consistorio no ha concedido ni una sola licencia que dé amparo a las ampliaciones o el cambio de usos acometidos. Así, por ejemplo, el concejal de Urbanismo, Ángel Luis Guerrero, ya dijo, en el momento en que se iniciaron las diligencias previas, que el uso autorizado en los amplios sótanos de la villa es el de instalación de sala de máquinas de servicios de la casa o almacén. Sin embargo, el Consistorio ha comprobado que esta parte de la mansión está ocupado por una piscina interior, gimnasio con ring de boxeo, sala de fiesta y cine.

Los técnicos consideran que se trata de una infracción urbanística grave y que las obras no autorizadas no son legalizables, entre otras cosas porque sobrepasan los parámetros de edificabilidad, ocupación y volumen máximos previstos en la Norma Territorial Cautelar actualmente en vigor.

El Consistorio ha requerido a la promotora a que, tal como contempla la ley de ordenación y uso del suelo, en un plazo máximo de dos meses proceda a la legalización de las obras ejecutadas o a la reposición de la realidad física alterada. Además, se ha comunicado que se abrirá el correspondiente expediente sancionador.

Según fuentes municipales, la promotora se enfrenta a una multa de un mínimo de un millón de euros, pero puede ser el doble. En el caso de que las obras fueran legalizables, la cuantía de la sanción se sitúa entre el 50 y el 100% del valor de las construcciones ilegales, y si no se puede restablecer la legalidad sin su demolición, entre el 100 y el 250%. El porcentaje se fija a criterio del instructor. Las fuentes consultadas apuntan que si se trata de la primera sanción, se acostumbra a sancionar con el mínimo previsto.