Este año la competición de la Copa del Rey Mapfre es de lo más real. Y es que, por segunda jornada, Felipe VI volvió a coger el timón del Aifos. El monarca llegó al Club Náutico de Palma hacia las 11.20 horas de la mañana conduciendo su propio automóvil, que aparcó junto a la entrada principal. Vestido con polo blanco, pantalón azul corto, unas avarques menorquines y con mochila al hombro entró en las instalaciones haciendo un breve saludo a la prensa y a los curiosos que no dejaban de inmortalizar su llegada al club.

Una vez dentro, se dirigió al pantalán donde estaba amarrada la embarcación de la Armada Española. Allí, saludó a sus compañeros de tripulación, una tripulación que lidera el patrón Jaime Rodríguez Toubes. Tras estas primeras conversaciones con su equipo, el Rey no dudó en estrechar la mano y conversar con los regatistas de las embarcaciones vecinas. Así, hubo foto de familia con los tripulantes de Pez de Abril. Y tras estos saludos y toma de contacto, Felipe VI, al timón, y su equipo zarparon al mar dispuestos a darlo todo en la tercera jornada de competición.

En la tercera jornada de regatas, la Copa del Rey Mapfre contó con la visita del alcalde de Palma, Antoni Noguera, que se trasladó al Clun Náutico para disfrutar de la competición, una competición que una jornada más tuvo otro foco de atención. Y es que el hijo de Carolina de Mónaco y sobrino del príncipe Alberto, Pierre Casiraghi, está muy contento de participar en las regatas y confiesa que sería fantástico conseguir un podio en Palma.

La de hoy se espera que sea una jornada de lo más especial ya que esta mañana los organizadores de la Copa del Rey Mapfre rinden homenaje a los regatistas españoles que participaron en los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992 con motivo de su 25 aniversario. Aunque no está confirmado, el monarca podría asistir a este sentido homenaje.