"Estamos muy contentos de estar aquí. Yo y el equipo. Nos encanta el evento, es el mejor de la temporada. Un evento de nivel mundial con muchas embarcaciones y muy bien organizado, así que estamos muy a gusto aquí", así se mostraba Pierre Casiraghi, hijo de Carolina de Mónaco, quien ayer acudió a un entrenamiento de clase catamarán CG32 en la 36 Copa del Rey Mapfre. El monegasco recordó la temporada anterior, donde parte de su equipo resultó herido y fue remplazado por nuevos tripulantes. "No es fácil empezar a competir con gente nueva en tu equipo. Este año estamos todos aquí y estamos preparados par luchar por un buen resultado", explicó Casiraghi.
Aunque el ya habitual de la competición mallorquina es optimista para este año, acepta que no hay nada predecible. "Con estas embarcaciones es difícil hacer previsiones. Todos los barcos están bien preparados. Todos los equipos son fuertes. Haremos todo lo que podamos, eso seguro", aseguró. "Conseguir un podio en Palma sería fantástico", añadió mientras hacía un repaso del equipo que le acompañará esta edición en su aventura marítima. Aunque no hay cambios de personal -están todos recuperados y a salvo- la embarcación ha sufrido pequeñas modificaciones durante el invierno, época en la que han aprovechado para entrenar también en la capital mallorquina.
Haciendo gala de su amabilidad y simpatía, facetas comentadas por todos aquellos que han tratado con él durante estos días, Casiraghi comentó que el sábado debe volar a Inglaterra para competir, así que queda en el aire si el sobrino del príncipe Alberto II de Mónaco y nieto de Grace Kelly podrá asistir a la entrega de trofeos que oficiará Felipe VI en Ses Voltes ese mismo día.
Cabe recordar que Pierre Casiraghi recogió el año pasado de manos del Monarca el premio a mejor armador y timotel en la 35 edición de la Copa del Rey de vela. El patrón de la embarcación GC32 Malizia ha visitado este fin de semana las instalaciones del club palmesano para regatear con sus compañeros de equipo y pasear con su actual mujer, Beatrice Borromeo, con la que se casó en 2015 y con quien paseaba el año pasado por el Club Náutico de Palma cuando ella estaba embarazada de su actual hijo, nacido el 28 de febrero de este año en el hospital princesa Grace de Montecarlo, al que bautizaron como Stéfano en homenaje al padre de Pierre, que murió en un accidente a bordo de una embarcación de alta velocidad en Montecarlo.
Personalidades en la Copa
Pierre Casiraghi no fue el único que se dejó ver en la jornada de ayer. Aina Calvo, la exalcaldesa socialista de Palma, estuvo presente para dar apoyo a la iniciativa de Ocean Dream, un proyecto impulsado por regatistas que han superado el cáncer. Carolina Cerezuela y Carlos Moyà también pasearon por las instalaciones del Náutico; y Álvaro Salazar, prestigioso cocinero con estrella Michelín también fue visto en la segunda jornada de la competición.
La extenista aragonesa Conchita Martínez también se subió a bordo de una de las embarcaciones. En concreto fue en la Mapfre y a su llegada se encontró con gran expectación mediática por parte de los medios.
