La Associación d'Artistas Visuals de les Illes Balears (AAVIB), el PP y el Pi han criticado la decisión de la concejalía de Cultura de convertir al responsable del Solleric en un director general elegido a dedo. Los tres coinciden en que dicha decisión se podría haber tomado el 2015 y no ahora.

La portavoz de la AAVIB en cuestiones de la FPEA, Marina Crespí, aseguró que se sienten decepcionados y agotados. Para ellos, crear una nueva dirección general implica añadir un cargo político más, que no será independiente. "Desde la Associació tenemos la impresión de que todo lo que hacen es improvisar sobre la marcha. Si querían crear una dirección que lo hubiesen hecho el primer día, no dos años después. Han perdido el tiempo y mientras el Solleric, el Balaguer y el CAC Ses Voltes, no han tenido un plan expositivo. Entendemos que esto no son buenas prácticas", dijo.

Por parte del PP, Xavier Bonet explicó que hace un año y medio ellos predijeron que esto ocurriría. Que el responsable de la Fundació Palma Espais d'Art se convertiría en un cargo controlado. "Este debería ser un puesto técnico ocupado por alguien del sector, no político. Ellos que se consideraban adalides de la cultura han desaprovechado durante dos años los espacios expositivos de Palma", manifestó Bonet.

"Mucho posturéo y poca gestión", dijo Toni Fuster, de El Pi, en referencia al comportamiento de Cort. El político manifestó que no entendía como el gobierno municipal puede consentir que la política cultural brille por su ausencia. También él considera que si la concejalía quería crear una dirección general lo podría haber hecho antes. "Así los buques insignia de Palma no estarían abandonados. Se han sacado parches de la manga de forma sistemática. Y esto sólo ha creado inestabilidad", contó Fuster.

Cabe destacar que tanto el PP como El Pi aseguraron que hace un mes Llorenç Carrió presentó una carta de dimisión que Cort tiene sobre la mesa. Sin embargo, al ser preguntado por este diario, el concejal negó que fuese cierto.