"Ilusionados y muy satisfechos". Así comenzaron y acabaron su jornada laboral nueve personas de la Asociación de Síndrome de Down de Balears (Asnimo) que ayer se convirtieron en dependientes de El Corte Inglés por un día, con motivo de la celebración del Día Mundial del Síndrome de Down. Con sus respectivos uniformes, sus plaquitas de identificación, maquilladas ellas, los nuevos 'fichajes' del centro comercial, de edades comprendidas entre los 19 y 31 años, desempeñaron las tareas propias del personal de venta de El Corte Inglés, para las que se habían preparado "a conciencia" en los talleres de la asociación, según explicó su presidente Juan Perera.
"Es un paso más para abrir horizontes a estas personas, para poco a poco hacerlas más conscientes, más capaces, que tengan mejor salud y que en un futuro puedan ser autosuficientes", explicó Perera, quien destacó orgulloso la labor de la asociación, que ya ha conseguido tener a cien de sus miembros trabajando en hoteles, ayuntamientos o colegios de la isla. Así, estos vendedores disfrutaron de una jornada en la que colocaron la mercancía en la tienda o atendieron a los clientes, en una acción que tenía como objetivo demostrar que estas personas están perfectamente capacitadas para integrarse en el mundo laboral, y con ello, facilitar su autonomía e integración en la sociedad.
Perera agradeció la ayuda del director de El Corte Inglés, con quien negocia ahora el próximo paso: conseguir que estas personas puedan lograr en los grandes almacenes un empleo de verdad.
