La Misericòrdia inauguró ayer su Betlem mallorquí, un nacimiento que con más de 350 figuras recoge oficios, costumbres y tradiciones de Mallorca, algunas ya extintas (como hacer uso de colchones de lana en las casas) y otras que todavía persisten, como son las matances.

El montaje de este nacimiento lleva firma femenina. Margalida Bover, Maria Rosa Forteza, Victoria Heredero, Catalina Rullán y Aina Maria López (de la asociación de Betlemistes de Mallorca) son las cinco personas que se encargan de montar un Betlem mallorquí con 14 años de historia; un nacimiento que ha necesitado de quince días de trabajo antes de ser mostrado al público.

Una de las peculiaridades de este Belén se halla en el tamaño de las piezas, en lo diminuto de sus protagonistas inanimados, hecho - que según dice Bover - ha necesitado de "muchísimo material". Bover es la artífice de la creación de las 350 figuras, y ella misma autora, junto a las otras cuatro mujeres antes mencionadas, de las 40 maquetas que componen el nacimiento.

El Belén, además de estar rodeado por un sonido en bucle con nadales y sonidos emanados del campo, cuenta con un buzón de sugerencias, en el que los asistentes pueden dejar sus comentarios con aquello que consideran que le falta al Belén. Menciones que, concluida la Navidad, se traducen en cambios en la siguiente campaña.

En este sentido y a modo de ejemplo, este 2016 al Betlem mallorquí se le ha añadido un halconero y una abuela que enseña a hacer ganchillo a su nieta. Así, "que haya tradiciones de antaño sirve para que los abuelos se las puedan explicar a sus nietos", señala Margalida Bover.

Francisco Romera, un mallorquín de 62 años que lleva siete años visitando el nacimiento, afirma que este Betlem mallorquí es "una maravilla por la cantidad de detalles geniales que tiene", al tiempo que añade: "Está muy bien que los jóvenes puedan conocer las tradiciones que les rodean".

Por otra parte, José Galindo, presidente de Belenistas Baleares, asociación que aglutina Belenes como el de El Corte Inglés, el Club de Mar o la Fundación Barceló, indica que, en muchos casos, este año el albero ha sustituido a otro material, el poliespán.

Entre otros, el Ayuntamiento de Palma inaugura mañana su Belén en Cort.