La Iglesia se moviliza este año para buscar una alternativa a la cada vez más popular fiesta de Halloween.

Este es el caso de la parroquia de Son Cladera, donde esta tarde ha celebrado una fiesta Holywin, con disfraces de santos, vírgenes y religiosos.

Los participantes, la mayoría niños, debían ir disfrazados de alguna figura religiosa, dando un sentido "positivo" a la celebración y recordando las vidas de los santos. La fiesta pretende ser una "alternativa interesante a lo terrorífico de Halloween", según aseguró el Bisbat de Mallorca.