El segundo festejo de toros de la temporada en Palma se celebró ayer a las 22.00 horas en el Coliseo Balear, un evento que tal vez sea el último que podrá verse en este recinto a causa de la declaración de Palma como ciudad antitaurina por el actual equipo de gobierno municipal.

En el festejo se vio a varios miembros de la Familia Real, como la infanta Elena, una gran aficionada a los toros, que acudió a la plaza acompañada de sus dos hijos, Froilán y Victoria Federica, ambos vestidos de manera muy formal, y que se sentaron en primera fila en la zona del tendido 7 de la plaza, mientras el público aplaudía su presencia.

El concurrido espectáculo llenó más de media plaza y la gente pedía el comienzo de la corrida con palmadas y entre gritos de "libertad".

Un cartel estrella

La corrida de toros recogió un cartel estrella formado por el torero valenciano Enrique Ponce, que debutó como matador de toros en Palma después de 26 ños de alternativa; José María Manzanares, el lidiador de Badajoz más joven de alternativa y triunfador de la temporada estival del año pasado; y Alejandro Talavante, vencedor este año en la Feria de San Isidro de Madrid.

Los tres fueron recibidos con silbidos y vitoreos, y torearon por ese orden para lidiar con los seis toros obedeciendo las órdenes del inspector jefe y presidente del evento, Fernando Corchero, acompañado de Joan Oliver, el asesor veterinario.

Ponce se acercó a saludar a la Infanta antes de iniciar su actuación y le lanzó su montera, que la duquesa de Lugo cogió al vuelo, y también se despidió de ella y de sus hijos una vez hubo lidiado con el toro, mientras recibía aplausos del público.

Durante toda la corrida se escucharon gritos de "viva España" mientras la banda de música de s'Almudaina acompañaba la actuación de los toreros, como hace habitualmente desde hace cuatro años.

El público se rindió ante los movimientos del valenciano y de Talavante, al que no dudó en apoyar durante toda su intervención. Consiguió finalmente levantar a todo el público de su asiento, mientras que la actuación de Manzanares no fue tan acertada.