Con la llegada de las vacaciones aumentan los viajes en avión y también lo hace el del número de maletas que se pierden, llegan tarde o sufren daños, y para evitarlo o remediarlo los expertos aconsejan ser rápidos en su reclamación, después toca esperar.

Y para reclamar el equipaje perdido y dañado lo primero que hay que hacer es solicitar, en el mismo aeropuerto, el Parte de Irregulares del Equipaje (PIR) junto con una hoja de reclamaciones para dejar constancia de la incidencia.

Durante el periodo de vacaciones las quejas que llegan a asociaciones de consumidores sobre incidentes con el equipaje en los aeropuertos se multiplican.

Son situaciones que "generan gran preocupación y molestia entre los usuarios", cuenta a Efe la portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Iliana Izverniceanu.

Tras aterrizar, los pasajeros deben ir a la cinta habilitada para recoger sus maletas, y aquí puede empezar el periplo si el equipaje no aparece.

¿Qué hacer entonces?

Los asociaciones de consumidores coinciden en que existe "un desconocimiento generalizado", ya que los usuarios no saben dónde deben acudir.

La abogada experta en consumo de Legálitas, Araceli Durán, explica que es "esencial" dejar constancia del incidente.

"El pasajero tiene que acudir al mostrador de la compañía aérea o al de la Administración correspondiente -Aena en España- en el aeropuerto para pedir una hoja de reclamaciones y solicitar el PIR", indica.

Este formulario será necesario para reclamar el equipaje, algo que desconocen la mayoría de los usuarios.

Las cuestiones relativas a los derechos que tienen los pasajeros en caso de daño, pérdida y destrucción del equipaje por parte del transportista están reguladas en el Convenio de Montreal -que data del 2004 y unifica ciertas reglas para el transporte aéreo internacional-.

Durán explica que este convenio indica que en caso de que el equipaje sufra un daño, el afectado tiene siete días para reclamar.

Además, no considera que una maleta esté extraviada hasta que no pasen 21 días después de la reclamación, hasta ese momento se considera retraso.

En el caso de que la maleta no aparezca, el afectado tiene derecho a que la compañía aérea le abastezca con un equipo de enseres básicos -como ropa o higiene personal- durante las primeras tres semanas que, en ningún caso, "satisface el daño que se produce", asevera Izverniceanu a Efe.

O si lo prefiere, puede adquirir por su cuenta aquello que necesite. Después, la compañía aérea abonará el importe, siempre que sean elementos necesarios para subsistir.

Si la maleta no aparece pasados los 21 días, ya está extraviada.

Y en este caso, los expertos recomiendan que el usuario vuelva a ponerse en contacto con la compañía para reclamar una indemnización.

Este importe también está fijado en el convenio, que puede ser de hasta unos 1.200 euros -la cifra es aproximada porque se calcula en base a unas unidades de cuenta, los derechos especiales de giro que equivalen al valor diario del euro-, aclara Durán.

Si en un plazo de un mes no recibe respuesta por parte de la compañía, "el siguiente paso será la reclamación judicial", manifiesta a Efe Miguel Ángel Serrano, miembro del gabinete jurídico de Facua-Consumidores en Acción.

Según Durán, "alrededor del cincuenta por ciento de los afectados recurre a la vía judicial, pero otros muchos no".

Y el transportista no suele presentarse el día del juicio, así que "el juez da por buena la valoración del afectado", asegura.

Pero, en cualquier caso, la indemnización no será superior a los 1.200 euros, a no ser que el pasajero hubiese realizado una declaración especial de valor de los bienes.

Algo que recomiendan los expertos, ya que es un trámite sencillo por el que las compañías cobran un suplemento en el mostrador de facturación y con el que el equipaje "está totalmente asegurado".

En cuanto a los seguros de equipaje que ofrecen las propias compañías, las asociaciones de consumidores recomiendan leer la letra pequeña, "para estar seguros de las cláusulas y condiciones que cubre el seguro y no llevarse sorpresas", asevera Serrano.

Mientras tanto, las asociaciones denuncian que la legislación existente no avanza, piden un control de equipaje más exhaustivo y recuerdan que el máximo de indemnización económica fijado por extravío data del 2004.