El BH Mallorca, hotel de Magaluf que desde hace ya unos años ofrece actuaciones de figuras musicales de primer orden, se llenó el pasado jueves de jóvenes, mayoritariamente británicos, dispuestos a escuchar y vivir los temas del dúo electrónico Disclosure, que desde el lanzamiento de su álbum Settle, en 2013, gira alrededor del mundo.
El concierto, que era uno de los más esperados del verano, fue presidido por otro dj británico del género house, Duke Dumont, que actuó el pasado día 5.
"Whats going on Mallorca? Are you ready? Let's do this!" (¿Qué pasa Mallorca?¿Estáis preparados? ¡Vamos a por ello!) Con estas palabras iniciaron su actuación los hermanos Lawrence, es decir, Disclosure. El espectáculo fue seguido en directo por mayoría británica, jóvenes que llenaron tanto el jardín como los balcones del hotel desde donde coreaban sus mayores éxitos.
El grupo aprovechó la ocasión para presentar su nuevo EP compuesto por tres temas, dos de ellos ambientados en los años 70, como Feel like I do, Moog for love y el tercero, BOSS.
Dusky inicia la actuación
La fiesta comenzó sobre las 21.30 de la mano del grupo invitado Dusky, que caldeó el ambiente con algunos de sus mejores temas , como Skin deep o Yoohoo, acompañados de un espectáculo de luces y ráfagas de humo verticales y horizontales que cubrieron el escenario. Su actuación acabó con uno de sus hits más populares, Ingrid Is A Hybrid, y un abrazo de estos con los que iban a convertirse en triunfadores de la velada.
'When the fire starts to burn'
El público se vino arriba y emepezó a gritar, cantar y a moverse enérgicamente y sin sentido con las primeras notas de este tema que Disclosure eligió para abrir su concierto. El exterior del hotel se inundó de brazos alzados y móviles que grabaron cada instante, mientras en las pantallas latía al ritmo de la música el retrato gráfico que caracteriza a los hermanos Lawrence.
Los hermanos Guy y Howard Lawrence, pinchando sus mejores temas.
La noche de los éxitos
El concierto, que duró más de tres horas, no decepcionó a nadie, pues sonó el mejor repertorio de un grupo que no deja de ganar adeptos. Algunas de las canciones que se pincharon fueron Holding on, Yo&Me, White noise y Latch, sin duda, uno de los momentos más mágicos de la noche.
También se atrevieron con algunos remixes, entre los que estaba el de Work It que popularizó Missy Elliott. Durante la actuación empezó a chispear, circunstancia que no acabó con la emoción del público, que continuó bailando al ritmo del estribillo de una canción que enamoró.
