"Qué sinvergüenzas... jugar con la salud de la gente", se indignaban los lectores con los detenidos por vender alimentos en mal estado en tres establecimientos de alimentación en Mallorca, dos de ellos en Manacor y uno en Marratxí.

"Creo que esto era lo último que esperaba leer", comentaba la gente alarmada por la estrategia de manipular etiquetas de productos que habían excedido la fecha de caducidad. "Se nos han quitado las ganas de comer carne", señalaban otros ante las imágenes de los 300 kilos de alimentos caducados intervenidos. "Estamos bien arreglados, ya no se puede uno fiar de nada ni de nadie", era el lamento general.

Y de la comida en mal estado, al malestar de los palmesanos: las pintadas contra los turistas que aparecieron esta semana en Ciutat provocaron el rechazo de la mayoría que opinaba: "Esas pintadas no ayudan a nada ni solucionan ningún problema. Realmente da pena la gente que piensa que el vandalismo es la forma de reivindicar algo".

"El nivel de estupidez no tiene límite. Baleares sin turistas se convierte en hambruna para todos. Casi todo el dinero que se mueve es gracias al sector servicios, donde entra el turismo", decía un lector, mientras otro afirmaba: "¡Qué pena! Esta gente no piensa antes de hablar. Tendría que dejar el orgullo más bajo y dar gracias a Dios de que hay guiris".

Por contra, alguien criticó el turismo que acude a Magaluf y que ha aparecido en los medios de comunicación los últimos veranos: "Turismo malo como el de Magaluf, mejor que se vayan por donde vienen. Bien, rápido y con multas. Por ejemplo, los del puerto Pollença sí son turismo de calidad".

Sin embargo, no solo los ciudadanos de Palma debatieron sobre el tema. Un visitante de Mallorca también quiso dejar su opinión: "Soy turista y por segundo año elegimos su hermosa isla para nuestras vacaciones y me gratifica la mayoría de lindos comentarios. Porque no solo es ir a su tierra a pasarlo bien, viendo paisajes hermosos, playas, o comiendo o bebiendo, sino que es un placer que se nos trate bien como personas. En lo que a mí respecta me sentí como en mi casa".