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Opinión

La Universitat de les Illes está en la onda

La Universitat de les Illes Balears se encuentra aprisionada entre un rector que tendrá que explicar su gestión en Sa Nostra como testigo del caso Infanta...

La Universitat de les Illes está en la onda

El Universo le dijo al científico:

-No nos habían presentado.

La Universitat de les Illes Balears se encuentra aprisionada entre un rector que tendrá que explicar su gestión en Sa Nostra como testigo del caso Infanta, y catedráticos que se presentan en el campus con extraños guardaespaldas. Por fortuna, queda espacio y energía para un minúsculo agujero negro irradiante de física teórica, que permite cumplir a la institución con su encomienda universal.

La UIB está en la onda. Puede que el catedrático Carles Bona hubiera preferido ser alcalde de Palma por el PSOE. Sin embargo, dirigir el único grupo español que ha participado en el descubrimiento o escucha de las ondas gravitatorias, colmaría la ambición de cualquier investigador. Es una aportación adecuada al centenario de Ramon Llull. Al fin y al cabo, Einstein tendría hoy la edad de los lulistas más eminentes.

La doctora Alícia Sintes lo explicó como el ayuntamiento de dos ballenas colosales, a la escala de Melville. Un tal Einstein emparentó definitivamente espacio, tiempo, materia y energía. No hay un telar en el que nos desenvolvemos, sino que definimos el telar al movernos. Las sacudidas sísmicas de este tinglado, aunque el padre de la Relatividad preferiría hablar de "estornudos de Dios", se conocen como ondas gravitacionales. Multiplican en potencia a la suma de estrellas del Universo. Desgarran nuestro material más íntimo, en septiembre nos dolió el alma y ahora nos enseñan los gemidos captados en Estados Unidos.

La ciencia aprende a escuchar. La física de la filosofía reemplazó tiempo atrás a la filosofía de la física. Se piensa en ecuaciones, no en versículos. Las ondas gravitacionales se desplazan hacia el horizonte einsteiniano en que "para nosotros, físicos teóricos, la distinción entre pasado, presente y futuro no tiene sentido". Lo dijo a la muerte de su amigo y corresponsal Michele Besso. No solo predijo la ondulación, también avisó sobre la técnica para detectarla.

Quienes siempre apostamos por Einstein sobre Newton, vamos a cenar gratis. A los comunes mortales nos basta que todo tenga sentido, los físicos persiguen que todo tenga el mismo sentido, aunque las teorías unificadoras conduzcan a un contrasentido.

Quedan presupuestos einsteinianos por resolver, el último profeta también creía en la telepatía. Las ondas gravitacionales de la UIB no devuelven a la rectora Montse Casas, pero enfatizan su recuerdo de que otra Universitat es posible. Tal vez si se pone en marcha la comisión parlamentaria de investigación sobre Sa Nostra, auspiciada por Més. Pero hoy no queda espacio para pragmatismos. Los teóricos triunfales debaten si estamos conociendo el Universo, o si solo lo estamos interpretando con el lenguaje de los signos.

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