"Cuánto nostálgico del régimen", se lamentaba un lector ante los incidentes que marcaron el acto de homenaje a "los caídos por España" frente al monolito de sa Feixina el pasado domingo. La tensión estalló cuando dos personas desplegaron una bandera republicana provocando el malestar de los presentes, al punto de que uno de ellos llegó a pegarle un puñetazo a un joven con la enseña tricolor.

"La democracia es permitir que cada uno piense y haga lo que sienta su cabeza y su corazón, siempre dentro de la ley. No me gusta la violencia y que alguien haya pegado a otra persona no es correcto ni está bien", opinaba un internauta que como la mayoría pedía "paz" ante la confrontación que genera la decisión de Cort de demoler el monumento. "Si tiene que ser en memoria de todos los caídos de ambos bandos, pues que mantengan el monolito, pero si tiene que ser un punto de violencia, vendetta y desunión, pues me temo que será mejor demolerlo", se manifestaba otro lector.

"No me considero extremista de ninguno de los dos bandos, pero considero que gastar el dinero público en derribar este monumento cuando podría invertirse en acciones sociales, es un acto más bien político que lo único que genera es discordia", opinaban también. "Por favor, creo que ni unos ni otros han entendido lo de la libertad de expresión y manifestación. Lo de acabar a puñetazos me parece fatal. Creo que falta mucho por aprender", se sucedían los lamentos. "Por desgracia, incidentes como este demuestran que la extrema derecha continúa presente entre la población balear", observaba un lector, mientras otro afirmaba: "Estos cuatro gatos le han hecho un flaco favor a la causa del mantenimiento del patrimonio. A esta deplorable representación se asirán los iconoclastas para malgastar el dinero público en derribos que el futuro condenará".

"Hay dos cosas infinitas, el Universo y la estupidez humana, aunque de lo primero no estamos muy seguros", concluía otro lector.