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Entrevista

Julius: "No soy mago. Tengo una gran habilidad para crear platos y adaptarlos a los 22 minutos"

Julius (Palma, 1979) es una de las estrella televisivas de Canal Cocina.

Es uno de los cocineros estrella de Canal Cocina. Triunfa con el programa Los 22 minutos de Julius. Hablamos de Julio Bienert. Todo el mundo piensa que es vasco pero no. Nació en Palma en 1979. Su madre estaba destinada en la isla como azafata de Spantax. A los cinco años tomó un avión que lo llevó a Madrid, el nuevo destino de su progenitora. Confiesa que le gusta más comer que cocinar, por ello, se dedicó a los fogones. En pantalla emana simpatía, cercanía. No quiere compararse con el gran maestro televisivo de la pantalla, pero si sigue así tiene pinta de convertirse en el sucesor de Karlos Arguiñano. Ahora reside en Eivissa, para evadirse un poco de Madrid. "Es una locura y como lo puedo compaginar con mi trabajo, he venido a las islas. En verano es agobiante pero Eivissa es muy tranquila, hay una paz increíble. Está el mar, la gente, la comida", desglosa.

-¿De dónde surge su pasión por los fogones?

-Mi pasión por los fogones viene de pequeñito. Además empezó en Palma. Era muy pequeñito y cuando íbamos a tomar unas tapas, yo siempre pedía paella. Mi abuelo y mi padre eran grandes gourmets y mi madre y mi abuela eran muy buenas cocineras de casa. Como ya he dicho más de una vez, siempre me gusta más comer que cocinar. Y como me gusta comer, tuve que aprender a cocinar.

-¿Cuál su referente culinario?

-¡Son muchos! Desde Elena Santoja de Con las manos en la masa hasta Carlos Arguiñano. Después están grandes cocineros como Martin Berasategui. Soy muy de la cocina vasca aunque la catalana también me encanta. La internacional también me apasiona.

-Ha sido discípulo de Arguiñano, Arzak o Subijana. ¿Qué ha aprendido de estos maestros?

-Amar la cocina como la amo. Cada uno tiene su estilo pero de ellos he aprendido a respetar y a querer el mundo gastronómico y la cocina.

-En 2006 llegó al mundo de la televisión. ¿Fue casualidad?

-Sí, nunca me esperaba acabar en un programa como Los 22 minutos de Julius en el que llevo ocho años o en TVE de la mano de Mariló Montero. Siempre había soñado tener mi pequeño chiringuito en la playa [lo estoy buscando por las islas] y terminar en televisión fue una sorpresa.

-¿Se ve en un chiringuito o en un food truck?

-Tengo unas ganas locas. El food truck es uno de los nuevos proyectos que tengo en marcha y espero poder cumplirlo muy pronto. Me gusta mucho comer y cocinar. ¡Qué mejor que hacerlo con un camión para dar a conocer mi cocina real, no la televisiva, y degustar los productos de cada uno de los sitios que visite!

-¿Cuándo le veremos a bordo de un camión?

-Está cerquita porque a mediados de septiembre ya tendré el camión y espero que el proyecto llegue a buen puerto.

-En 22 minutos prepara menús sencillos, económicos y ricos. ¿Es un auténtico mago de los fogones?

-No soy ningún mago pero creo que tengo una gran habilidad para crear platos en mi cabeza y adaptarlos al poco tiempo que tengo en televisión. Son 22 minutos pero en realidad son doce o trece para cocinar el plato. Es más la creatividad que la magia pero sí que creo que existe la magia.

-¿Es un reto preparar cada día un menú en 22 minutos?

-No es ningún reto. Es un hobby y una diversión. Me lo paso muy bien, me divierto mucho y si soy capaz de enseñar algo a alguien, imagínese lo feliz que me siento."No me puedo comparar con Arguiñano porque es el gran maestro de los cocineros televisivos"

-¿Por qué 22 minutos?

-Nos pareció un número atractivo y todo el mundo tiene 20 minutos para dedicarlos a la cocina. A parte, son los dos patitos.

-¿Cuál es el objetivo del Go! Julius que acaba de estrenar en You tube?

-El objetivo es acercarnos a más gente, que nos conozcan y se animen a contratar Canal Cocina. Estoy muy orgulloso de pertenecer a él porque es muy entretenido.

-¿Con qué tiempo récord ha preparado un plato?

-Por ejemplo, un canapé en minuto y medio.

-¿Qué balance hace de su paso por La mañana de la 1?

-Ha sido una experiencia muy buena porque empecé el pasado verano con Inés Ballester que es mi madrina televisiva y es una gran comunicadora, igual que Mariló Montero. La única diferencia es que con Mariló he tenido menos trato, ha sido más distante pero la verdad es que ha sido una maravilla poder presumir de haber trabajado con dos grandes de la televisión nacional."El secreto de mi éxito es mi cercanía con el público. Ven que soy una persona normal"

-¿Le veremos otra vez?

-¡Ojalá! No solo me gusta hacer programas, me lo paso muy bien preparándolos. Si sirve para ayudar a alguien a que cocine, yo estoy encantado.

-¿Se postula como el sucesor de Arguiñano?

-No me puedo comparar con él porque es el gran maestro de los maestros cocineros televisivos pero me gustaría seguir muchos años en televisión. Mientras haya gente que me vea y disfrute de lo que hago, yo encantado.

-¿Cuál es el secreto de su éxito?

-¡Mi cercanía con el público! Ven que soy una persona normal y corriente. Se ven iguales a mí. Y si yo puedo hacerlo, ellos también.

-¿Hay algún ingrediente que se le resista?

-¡Hay tantos! Para comer, los hígados y los riñones, no puedo con ellos y, por ello, los cocino menos. Me dicen que me quedan bien pero no puedo ni probarlos. Cogí manía de pequeño al hígado y no puedo con él.

-¿Qué consejo daría a un estudiante de cocina?

-Lo primero le diría que se lo piense dos veces porque es una profesión muy dura y muy sacrificada. No todos los cocineros han tenido tanta suerte como yo. He tenido que pelear mucho por mi profesión. He trabajado muchas horas mientras los demás estaban de fiesta. Los fines de semana, Navidad, Semana Santa o verano era cuando más trabajaba. Hay que luchar mucho para llegar a un buen puesto de trabajo en la cocina. Con tenacidad y un par de huevos, se logra lo que uno quiere.

-¿La cocina es pasión?

-La cocina es 90% pasión.

-¿Y el 10% restante?

-Corazón. El otro10% es mucho esfuerzo.

-¿España vive un boom de la gastronomía?

-¡Por supuesto! Espero que no se acabe nunca y que este boom sea una explosión brutal que deje una honda expansiva terrible. Como no vamos a tener un boom en la gastronomía española, si tenemos los mejores cocineros del mundo a nuestra disposición. Además disponemos una diversidad geográfica gastronómica inmensa. Desde el norte hasta el sur hay una diversidad brutal.

-¿Dónde se perdería en vacaciones?

-En cualquier rincón de las Balears.

-¿Qué no puede faltar en su mesa en verano?

-El gazpacho no puede faltar en mi casa. Además hacemos competiciones con los amigos y cada día nos superamos.

-¿Qué lleva un bocata de playa perfecto?

-Un buen pan [risas]. No debe llevar tipo de lácteos ni huevo ni ingredientes que se ponen mal con el calor.

-¿Si no hubiera sido cocinero, dónde le encontraríamos?

-En las nubes volando o en el fondo del mar buceando.

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