No esperes una segunda llamada, si desatiendes el primer intento de la persona amada. Parece una letra de Pablo Alborán, pero no tiene este problema, vistas las acampadas fieles a las puertas de su concierto. Y ni siquiera había telefoneado personalmente a las fanáticas en tienda de campaña, como si fuera una base de misiles. "Qué intenso es esto del amor", el malagueño lidera la rebelión que transforma corazones desgarrados en vísceras con garras. Y siento decirte que un ídolo no se fija más en quien llega antes, sino en quien llega más alto.