El llamamiento de una niña de 14 años que padece fibrosis quística a la presidenta chilena, Michelle Bachelet, para que le den "la inyección para quedarse dormida" ha reabierto el debate sobre la eutanasia en el país suramericano.

"Soy Valentina Maureira, tengo 14 años, sufro de fibrosis quística y solicito hablar urgentemente con la presidenta porque estoy cansada de vivir con esta enfermedad y ella me puede autorizar la inyección para quedarme dormida para siempre", dice en un vídeo grabado desde el hospital y difundido por las redes sociales.

El padre de la joven, Freddy Maureira, ha indicado en una entrevista concedida a la emisora chilena ADN que, aunque "es duro que una hija diga eso", tiene que apoyarla.

Por su parte, el Hospital Clínico de la Universidad Católica ha informado de que Maureira ingresó el 30 de enero por una descompensación pero "está estable", a pesar de que "tiene una desnutrición significativa".

Al margen de su estado de salud, el jefe de la UCI pediátrica, Andrés Castillo, ha reconocido que "está angustiada, al igual que su familia". "Nosotros le estamos dando el apoyo humano y médico corresponde", ha recalcado.

El portavoz del Gobierno, Álvaro Elizalde, ya ha adelantado que el llamamiento de la joven no puede ser atendido por La Moneda porque la legislación vigente en Chile no permite la eutanasia, según ha informado el diario local 'La Tercera'.

"Se trata de un tema del cual no es posible no sobrecogerse, estamos hablando de una menor edad y sobrecoge, genera sin duda solidaridad. Ahora, la normativa vigente en Chile no permite que el Gobierno acceda a una solicitud de esa naturaleza", ha aclarado.