Cayetana Fitz-James Stuart, duquesa de Alba, de 88 años, permanece ingresada en la UCI de la Clínica Sagrado Corazón de Sevilla estable con pronóstico reservado tras haber padecido una gastroenteritis, una afección respiratoria causada por una neumonía y una arritmia cardíaca, ya controlada.

Pese a este cuadro preocupante en una persona de edad tan avanzada, el equipo médico que la atiende ha encontrado razones para el optimismo, y el intensivista Juan Antonio Márquez Vacarro ha dicho a los periodistas que, "igual que tiene mucha edad, tiene mucha naturaleza".

Después de ingresar en la UCI a las 21.00 horas de ayer, con ayuda de oxígeno, la duquesa está respondiendo "muy bien" a la medicación, según los médicos, quienes han explicado que, gracias a esa reacción, se ha estabilizado su estado y ya ha superado la gastroenteritis con que se inició esta crisis de salud.

Según el único parte médico emitido hasta ahora, a las 14.00 horas, la duquesa de Alba ingresó en la clínica "en situación de insuficiencia respiratoria secundaria, con neumonía de la comunidad asociada con arritmia cardiaca y repercusión hemodinámica".

Esta mañana presentaba "buena respuesta a medicación, permaneciendo en situación estable desde el punto de vista hemodinámico y respiratorio", según el parte médico presentado por el jefe de servicio de Cuidados Intensivos de la clínica, Carlos Ortiz Leyba.

Los médicos han asegurado que la paciente no abandonará la UCI hasta que esté plenamente garantizada que su situación es la adecuada.

Acompañada de Alfonso Díez y su hijo Cayetano

La duquesa ha estado acompañada por su esposo, Alfonso Díez, y por su hijo Cayetano Martínez de Irujo, quien ha sido el encargado de explicar a los periodistas el delicado estado de salud de su madre, a la que esta mañana ha podido visitar brevemente y con la que, ha confesado, le ha costado trabajo comunicarse.

A mediodía, procedente de Madrid, ha llegado a la clínica el primogénito de la duquesa, Carlos Martínez de Irujo, duque de Huéscar, quien también se ha dirigido a los periodistas que hacían guardia a las puertas de la clínica para decirles que, pese a la gravedad de la situación, su madre había pasado una buena noche.

Cayetano Martínez de Irujo ha explicado a los periodistas que su hermana se hallaba en viaje de trabajo y que él mismo le había pedido que no viajara a Sevilla al menos hasta comprobar cómo evolucionaba el estado de la duquesa durante el día de hoy.

Al igual que el equipo médico, el primogénito de la duquesa se ha mostrado optimista con la capacidad de su madre para superar sus problemas de salud.

El ingreso hospitalario de la duquesa de Alba es el segundo en los últimos cinco meses, después de que en junio de este año entrara también en la misma clínica sevillana para someterse a una revisión rutinaria.

En junio de este año, la duquesa acudió a la Clínica para una revisión de la válvula que le fue implantada en el 2009, cuando hubo de someterse a una intervención quirúrgica por su problema de hidrocefalia.

En aquella ocasión, Cayetana de Alba abandonó la clínica sevillana en una silla de ruedas, acompañada por su marido, y no necesitó tratamientos adicionales.

A diferencia de entonces, su estado ha sido definido por su hijo Cayetano como "difícil, pero no crítico".

El próximo parte médico sobre su estado de salud será emitido a las 10.00 horas de mañana martes, si no se producen imprevistos.