La Fira del Disc regresa este fin de semana a su antiguo emplazamiento, el Palma Arena, aunque esta vez lo hará en un formato diferente, ya que se desarrollará entre los pasillos del pabellón. "Todo estará más concentrado", afirma el organizador, Pere Terrasa, que apuesta por una edición "más acogedora" y que sin duda dejará a "todo el mundo satisfecho". Al menos las previsiones son "positivas", teniendo en cuenta que el regreso de este encuentro el año pasado, tras unas ediciones de parón, "no fue malo". La única preocupación de Terrasa se encuentra en el partido que enfrentará al Madrid contra el Barcelona esta misma tarde. "Tendremos que luchar", reconoce, pero se muestra convencido de que la gente "llegará pronto y, el que quiera, se irá antes". En este sentido, será la primera vez que la feria abra sus puertas el sábado por la mañana.

Otra novedad importante se halla en los precios. El pase de día se ha fijado en cinco euros con un CD de regalo, y ocho si se prefiere un LP. "Son cifras en las que nos movíamos hace 15 años", admite el impulsor del evento. Los melómanos interesados en asistir tanto sábado como domingo tan solo deberán abonar un suplemento de dos euros, además de de contar con descuentos para los que presenten el Carnet Jove. "Esperamos mucho público joven, que no suele fallar, además de los que vendrán a dar una vuelta y se llevarán una camiseta". Pero si hay un perfil al que va dirigida la Fira es al coleccionista, "sobre todo de vinilos". El promotor cuenta que se trata de un género al alza. "Triunfa en todo el mundo. En los últimos cuatro años ha sido la estrella de todas las ferias de Europa".

Respecto a si han contado con ayuda del Ayuntamiento, es claro: "Recibimos una pequeña ayuda", detalla. "Han puesto el escenario y sufragado una parte del equipo de sonido". Sin estas aportaciones, la Fira del Disc "sería imposible".