Se anunciaba como una conferencia sui generis y lo fue. El punto de partida, original y ameno, partía de emular un programa radiofónico sobre las tablas del Principal. No en balde hay que recordar que el crítico musical de este diario, Pere Estelrich, es un habitual comunicador en las ondas, actualmente en Ona Mediterrània. Así, Estelrich se puso el disfraz de sí mismo, frente al micro, en una charla-representación a fin de conversar sobre los finales de la ópera Turandot, que hoy reestrena la sala del Consell.

En primer lugar, el comentarista musical recordó que este título lírico quedó inconcluso por la muerte de Puccini. Junto al experto en ópera y vicepresidente de la Associació Amics de l´Òpera del Teatre Principal Kiko Cañellas, invitado y caracterizado como un sabio oriental extraído del propio montaje ("para mí es también un guiño a Cañellas porque es un auténtico sabio y erudito de la ópera", comenta Estelrich), hablaron sobre diferentes tesis que giraron en torno al hecho no de que Puccini muriera antes de acabar Turandot sino de que quizá no pudo terminarla antes de morir. Un enigma nuevo a sumar en la historia.

Asimismo, ambos especialistas hablaron sobre el personaje de Liú, "la verdadera mujer pucciniana, que es como Mimi o Butterfly". Estelrich también defendió que el gran invento del compositor italiano en Turandot fue el de introducir a Liú, "un personaje que no existía en la Commedia dell´arte".

Por otra parte, durante el acto, los dos expertos se refirieron a los músicos que habían construido finales para Turandot. Repasaron el tradicional, el de Franco Alfano. Luciano Berio hizo otro "en 2002", y uno de los más recientes, realizados para la Ópera de Pekín, corrió a cargo de Hao Weiya.

Además de la música, también repasaron diferentes versiones escénicas de posibles finales de esta pieza inconclusa. Por ejemplo, "Nuria Espert", que huye del final feliz, "hizo que Turandot se suicidara con un puñal", comenta Estelrich. "También se han aplicado visiones lésbicas sobre el personaje", agrega el crítico de este rotativo.

El original acto de ayer se cerró con la aparición de la propia Liú, interpretada por Maia Planas, quien hablo tanto de su personaje en el montaje como de su propia trayectoria profesional.