Tras trece meses sin gestor, el anuncio de la nueva dirección de Es Baluard ha estado rodeado de sorpresa. Al final, Nekane Aramburu se ha alzado con la plaza de responsable del centro de arte tras un concurso que arrancó en abril de 2012 con la publicación de las bases de la convocatoria. La nueva directora de Es Baluard es licenciada en Historia del Arte y cuenta con un máster en Museología. En su presentación de ayer, Aramburu manifestó que estaba "feliz" con su nuevo cargo y aseguró que su objetivo es dotar de personalidad a la sala de exposiciones y convertirla en el "museo de Balears, potenciando el arte de aquí, los artistas emergentes y también los consolidados". "Se necesita trabajar la marca, darle una definición", apuntó.

Nekane Aramburu estuvo acompañada por el conseller de Educación y Cultura del Govern, Rafel Bosch, el vicepresidente del Consell, Joan Rotger, y el teniente de alcalde de Cultura de Palma, Fernando Gilet, quien explicó que se presentaron 19 candidaturas. Hay que recordar que un jurado mixto formado por cuatro técnicos designados por la comisión ejecutiva y cuatro expertos independientes seleccionaron en otoño cuatro nombres: Francisca Niell, Santiago del Olmo, Nekane Aramburu y Orlando Britto. En los últimos meses, fuentes cercanas al museo aseguraron que Niell era la candidata mejor situada para asumir la dirección. Las especulaciones sobre posibles sorpresas empezaron este pasado viernes cuando el Museo convocó la rueda de prensa para anunciar a la nueva responsable. Ayer se confirmó que Aramburu asumirá "de inmediato" la responsabilidad de gestionar el museo. Gilet argumentó que el Patronato del museo optó por Aramburu basándose en su currículo y en su capacidad para asumir la dirección artística y técnica del museo. Además, remarcó que ha pesado su experiencia como gestora cultural a nivel nacional e internacional y como comisaria independiente. También destacó la calidad e innovación del proyecto presentado para dirigir esta institución. Aramburu se incorpora a la dirección de Es Baluard con un contrato de cuatro años, prorrogable otros dos más, con un salario de 55.000 euros brutos.

Proyecto innovador

El proyecto de Aramburu es "innovador" y se basa en la internacionalización y la innovación, además plantea una política de trabajo en red desde el contexto local. "Estoy interesada en que Es Baluard se dé a conocer en el sistema del arte nacional e internacional pero también que lo haga con una coordinación de los equipamientos regionales y en el contexto local", manifestó. "Afianzada la casa madre", su plan plantea que Es Baluard se inserte "con visión de futuro y en perspectiva en la evolución de la situación cultural en la que nos encontramos inmersos: una crisis económica fuerte y una transformación del sistema del arte". Avanzó que su gestión estará basada en la transparencia y aseguró que su proyecto irá "mutando" para "sintonizar" con la realidad balear. Remarcó que necesita un periodo de evaluación para analizar el estado museológico, el equipamiento y los contenidos artísticos para dotar de personalidad a Es Baluard. De hecho, Aramburu avanzó que esta misma semana visitará a los galeristas isleños y se reunirá con los artistas y los colectivos independientes porque no concibe otra manera que trabajar con ellos, "desde lo local y la horizontalidad". "Todo el mundo debe opinar sobre la gestión porque se trata de un museo público", sentenció.

Aramburu especificó que necesita trabajar "la marca" para darle una definición. De hecho, en su proyecto detalla que en sus primeros dos años al frente de Es Baluard centrará los esfuerzos en crear identidad y en la sostenibilidad. "Es Baluard tiene que ser el motor radar de una nueva manera de entender el arte moderno y contemporáneo inserto en las demandas de la sociedad y la renovación del sistema del arte", apunta. Además, apuesta por analizar el equipamiento para lograr una contención de gastos y aboga por una línea de gestión que permita la autofinanciación de determinados proyectos.

La colección del museo será el punto de partida y el núcleo central pero Nekane Aramburu tiene claro que necesita dotarla de personalidad porque es "muy dispar" pero "el papel del museólogo es dar sentido a la colección". Con un presupuesto de un millón de euros para 2013, admitió que no hay dinero para nuevas adquisiciones pero reconoció que se pueden suplir las "lagunas" gracias al arte emergente y a patrocinios o mecenazgos. Otra de sus primeras acciones será estudiar el edificio para definir las salas de exposiciones y dotarlas de personalidad. "La arquitectura del propio museo tiene espacios residuales que pueden utilizarse para proyectos. El entorno urbano y otras zonas de la ciudad deben ser sus cómplices", reconoce en su proyecto. En mente tiene "muchos proyectos" y en su programa menciona algunas consideraciones a seguir como retrospectivas que vinculen lo balear con lo internacional o explorar las posibilidades de los fondos de Es Baluard con comisarios jóvenes para dar lugar a nuevas lecturas, además apuesta por las coproducciones nacionales e internacionales.

La formación especializada y la educación será otras de sus líneas maestras. Es Baluard impartirá cursos de formación, por ejemplo, de comisariado. "El potencial de los artistas es estupendo pero no tienen una plataforma fuera", lamentó. Las tecnologías y el I+D desempeñarán un papel importante en la gestión de Aramburu.