Si uno quisiera ahora -póngase que la idea no estuviese hecha- realizar un calendario solidario con los deportistas mallorquines más reconocidos en la actualidad, lo tendría complicado. Difícil por una sencilla razón: necesitaría que el año fuese no de 12 meses, sino de unos cuantos más. Y es que si uno se para a pensar, la lista de deportistas isleños que cosechan títulos importantes y en una interesante variedad de disciplinas es extensa: motociclismo, fútbol, taekwondo, natación, natación sincronizada, bicicleta de montaña, gimnasia artística, kickboxing, piragüismo... "por poco hasta nos sobran", afirmaba ayer Jesús Hernando, gerente de la asociación de niños con parálisis cerebral (Aspace).
En todos y cada uno de los deportes mencionados existe el nombre de un mallorquín que, como hizo ayer el bicampeón mundial de Moto GP, Jorge Lorenzo, (que cierra el calendario), ha querido mostrar su lado más solidario y colaborar en la creación del almanaque benéfico que la entidad ha podido preparar gracias al desinteresado trabajo de muchos profesionales, entre ellos el fotógrafo Nando Esteva. Un calendario que reúne al futbolista del RCD, Pedro Bigas; al subcampeón del mundo de Moto3, Luis Salom; a la vigente subcampeona olímpica de taekwondo, Brigitte Yagüe; la integrante del equipo de natación sincronizada, Marga Crespí (que obtuvo la medalla de bronce en Londres 2012); el exfutbolista del Mallorca, FC Barcelona y la selección española, Miquel Àngel Nadal; la pentacampeona del mundo de bicicleta de montaña y medalla de bronce en Sidney 2000, Marga Fullana; la medalla de oro en suelo en el mundial de gimnasia artística 2002, Elena Gómez; el laureado nadador paralímpico, Xavi Torres; el campeón del mundo de kickboxing, Juanito García y el piragüista Sete Benavides, que obtuvo un cuarto puesto en los último Juegos Olímpicos.
Doce figuras que han servido a la causa de la organización sin ánimo de lucro para, aprovechando que 2012 "es año Olímpico", utilizar los beneficios de este proyecto para "la adquisición de material deportivo y de estimulación sensorial". Una tirada inicial de 3.500 ejemplares que estarán disponibles en dos formatos, sobremesa (tres euros) y pared (cinco euros) la semana que viene, y que serán puestos a la venta por socios y trabajadores de la agrupación, familiares de los pacientes, amigos y entidades colaboradoras.
"Siempre que puedo me gusta gastar un poco de mi tiempo libre para ayudar, en este caso, a niños con problemas de parálisis cerebral", afirmaba ayer Jorge Lorenzo, preguntado por la experiencia. "Son niños que tienen ciertas dificultades de movilidad, pero son muy alegres y estoy muy contento de estar aquí", reconocía el piloto mallorquín, que se marchó de la isla ayer mismo, después del caluroso recibimiento en Palma.
Del mismo modo, el fotógrafo Nando Esteva revelaba a este diario que cada año "disfruta" dedicándose a tres o cuatro proyectos solidarios, y que han sido seis meses de trabajo muy intenso, pero muy gratificante: "Es una manera que tengo de salir del trabajo rutinario y dedicarme a proyectos que me dan una motivación personal", explicaba.
Una lucha diaria
Si para los deportistas y profesionales ha sido algo positivo, imagínense el placer de las familias y los niños que han podido fotografiarse con ellos: "Lo único que mira Carlota son las carreras de motos y de Fórmula 1", reconoce su padre, Fernando Bosch. Él ha sido un punto fuerte en la toma de contacto con los deportistas puesto que, según su mujer, Yolanda Munar, "ha colaborado para llegar hasta ellos". Una labor que a priori resulta complicada, cuando se trata de ejemplos como el de Lorenzo, que hasta hace bien poco viajaba de un continente a otro luchando por el mundial.
A pesar de las dificultades de agenda, el compromiso de todos ha sido "pleno", recuerda Hernando. Y al final, medio año después, bebés, niños de 2 y 3 años, adolescentes y usuarios de la residencia de Aspace han participado en lo que acabó siendo un sorteo, "porque todos querían salir".
Y es que para ellos, "cada día se disputa una gran carrera".
