El parc de n´Hereveta de Porreres se convirtió el lunes en el escenario perfecto para los amantes de la música en catalán. Como ya es tradicional, el municipio mallorquín organiza desde hace unos veranos los conciertos de rock catalán más esperados por los mallorquines.

Porreres ya tiene bagaje con los macrofestivales de música y eso se nota en la organización. Una gran explanada cedida por el Ayuntamiento para que los más aficionados puedan acampar durante los dos días de actuaciones, baños públicos, mercadillos, chiringuitos de comida y grandes barras llenas de camareros dispuestos a saciar la sed de los asistentes lo más rápido posible.

La noche del lunes reunió a unas 4.000 personas que no pararon de cantar, saltar y bailar a ritmo de sus grupos favoritos.

Anegats abrió la velada

Pasaban quince minutos de las once de la noche cuando los primeros acordes del grupo mallorquín Anegats llenaban el parc de n´Hereveta. Los clásicos del conjunto Fred, Irreals y Es missatge es clar fueron de los más aplaudidos por la gente, aunque no cabe duda que cuando Pep Álvarez, cantante del grupo, anunció que iba a tocar Tramuntana, la gente se volvió loca y coreó a todo pulmón la canción que Anegats compuso para uno de los monumentos más emblemáticos de la isla.

Después de más de hora y media de concierto, el grupo se despidió con su tradicional Cada nit, agradeciendo poder compartir escenario con "nuestros hermanos Antònia Font y Obrint Pas".

Antònia Font, muy aplaudidos

Entre un concierto y otro hubo un descanso de veinte minutos donde la gente aprovechó para ir al baño o a tomar algo. Llamaba la atención un grupo de jóvenes con camisetas de Antònia Font: "Hemos venido desde Palma solo para verlos a ellos, ya vinimos el año pasado y este año tampoco podíamos faltar", explicaba Aina Gelabert.

El ambiente se empezaba a caldear, una batucada en medio del parque hizo más amena la espera, pero aún así, Antònia Font se hizo de rogar. Por fin, y ya pasadas la una de la madrugada, salía Pau Debon con su banda para deleitar al público con Clint Eastwood, Dins aquest iglú e Islas baleares entre muchas otras. Ponían fin a su actuación después de una hora y media con Calgary 88, de su último disco, Lamparetes.

Obrint Pas cerró la noche

Finalmente, casi a las tres de la madrugada, salieron los valencianos, que fueron el broche perfecto para cerrar una noche llena de sentimientos y reivindicaciones. Obrint Pas deleitó al público con canciones como Coratge, Som i serem o la clásica, La Flama.

Los conciertos de Porreres continuaron ayer en el parc de n´Hervereta con Aerosol, Els Amics de les Arts y Els Catarres. Un año más el festival de rock catalán fue un auténtico éxito.