"Entiendo que los trabajadores se pongan nerviosos pero la plantilla se debe ajustar. Aún no se cómo, si será mucho o poco pero se hará lo que se tenga que hacer"". Así respondía ayer la directora gerente del Teatre Principal, Margalida Moner, a las quejas de los sindicatos (CCOO y UGT) que "rechazan totalmente una reducción de plantilla" y que ya han denunciado su situación ante Inspección de Trabajo.

Esta situación se suma a la indignación del colectivo de dramaturgos y compañías teatrales que han visto desconvocadas las subvenciones que ya estaban resueltas por la anterior dirección de la Fundació.

Desde la delegación de la Unión General de Trabajadores en el Teatre Principal decían que Margalida Moner "ni se ha presentado con la excusa de que a algunos los tendrá que despedir". Debido a esto, y a otros motivos, la Federación de Servicios Públicos de UGT explican que desde parte de la Gerencia se produce una "continua falta de respeto a los empleados" entre las que destacan el "aislamiento del personal, la desestabilización emocional debido a la incertidumbre de recortes y despidos o el deterioro deliberado del rendimiento laboral de los trabajadores".

Salud laboral

La denuncia que han presentado también enumera como posibles infracciones en materia de salud laboral las "modificaciones unilaterales del organigrama de la fundación con intención de aislar a los trabajadores, así como la sustitución de funciones desarrolladas por trabajadores públicos de la Fundación, por personal externo".

Los trabajadores no entienden que "se hable de recortes porque la plantilla está sobredimensionada ya que cuando se celebran actuaciones grandes, se tiene que realizar un gasto que puede llegar hasta los 12.000 euros en personal extra", explican desde FSP-UGT.

También destacan la "incomunicación" y la "manera unilateral" con la que se "está llevando el plan de reestructuración". A este punto, la gerente del Principal ha contestado que de momento se está estudiando la situación y que "a mediados de septiembre" ya se podrá hablar de "una reunión" para ver cómo tienen que tratar el tema con los trabajadores.

Los sindicatos resaltan que los empleados habían solicitado una reunión ordinaria con la nueva directora y con Joan Rotger, el vicepresidente de Cultura, hace tres semanas y que hasta la fecha no se les ha informado sobre un posible encuentro.

Por parte de Comisiones Obreras también se oponen a los planes de recorte, despidos y recontratación y esperan un cambio de actitud por parte de la gerencia y del equipo de gobierno del Consell de Mallorca y comentan los rumores sobre "un despido masivo, selectivo o de recontratación de personal de su confianza". Respecto a esto, Moner subrayó ayer que "no he hablado de nada de eso. Estamos realizando un estudio desde presidencia y cuando lo tengamos terminado ya podremos hablar".