"Nuestra máxima aspiración es que las personas con alguna discapacidad intelectual puedan sentirse útiles e integradas en la sociedad", explica Pedro Sunyer, presidente de Aproscom, una entidad sin ánimo de lucro creada en 1969 que tiene su sede en Manacor.

Con cerca de 260 usuarios, Aproscom ofrece numerosos servicios desde que se detecta el problema en la niñez hasta la edad adulta. Entre los primeros cabe destacar la estimulación precoz, que se lleva a cabo hasta los seis años, y una escuela de educación especial concertada que atiende a menores a partir de los tres años.

La integración laboral de los usuarios es uno de los objetivos básicos de la asociación, que extiende sus servicios a la adolescencia y a la edad adulta con un programa de Formación Profesional adaptado para que puedan acceder formados al mercado laboral. "Nuestro objetivo es darles trabajo", afirma Pedro Sunyer, que también recuerda que "las empresas están obligadas a cubrir un 2 por ciento de la plantilla con personas con alguna deficiencia, aunque sólo un tercio lo cumple y las administraciones son las primeras que no lo hacen".

Una vez formados laboralmente, Aproscom ofrece a sus usuarios varias opciones según sus intereses y capacidades. Pueden ser derivados a un taller ocupacional de la misma entidad, a un centro de día, a una empresa externa o a Aproscem, una empresa de jardinería creada por la asociación cuyos empleados tienen reconocida su incapacidad y que puede ser contratada por todo aquel que requiera sus servicios.

Pedro Sunyer explica que "todas las personas quieren sentirse útiles e integradas, quieren poder llevar a cabo un trabajo y hacerlo bien" y lo ejemplifica con la integración en un grupo de esplai, donde pueden aprender y, además, constituir un beneficio para los demás miembros del grupo, porque "estar en contacto con esta gente también enseña mucho ya que se dan cuenta que valoran cosas que para nosotros la mayoría de veces pasan desapercibidas", afirma Sunyer.

Otros servicios que ofrece Aproscom son las viviendas tuteladas. Tiene tres en Manacor, que atienden a 21 personas, aunque el presidente la entidad afirma que podrían ser muchas más ya que hay una lista de espera de unas 20 personas.

En febrero de 2009 Aproscom también inauguró una residencia con capacidad para 24 personas que está abierta los 365 días del año y que en menos de tres meses tuvo que colgar el cartel de completa. El último proyecto de la entidad ha sido el de la estimulación precoz. Se inició el pasado mes de octubre.

Consciente de las necesidades sociales en tiempos de crisis y de las dificultades que pasan las entidades sin ánimo de lucro, la Obra Social Sa Nostra ha colaborado con Aproscom financiando parte del equipamiento de fisioterapia de su centro educativo, una inversión que pretende ayudar a estimular y mejorar la movilidad de los usuarios de este centro.

Para el futuro, Pedro Sunyer destaca la necesidad de conseguir más viviendas tuteladas y, especialmente, seguir trabajando para la integración social de las personas afectadas por alguna discapacidad con la intención de colocar el mayor número posible de usuarios en el mercado laboral.

El presidente de Aproscom explica así la importancia de este hecho: "si encontramos el trabajo que les gusta, los empresarios están contentos porque la persona trabaja bien y disfruta sintiéndose útil".

Sunyer finaliza analizando la situación actual de crisis económica, que ha agudizado las necesidades de las asociaciones sin ánimo de lucro y, siguiendo su filosofía de integración laboral, destaca que "cada persona que conseguimos que trabaje es una persona que no tiene necesidad de cobrar ayudas públicas".