Pilar del Río, viuda del fallecido Saramago, navegó ayer en la producción del Nobel para buscar al "escritor sin máscaras" en unas Converses donde precisamente se ha debatido sobre las máscaras del yo. En el homenaje al autor de Ensayo sobre la ceguera, fallecido el pasado 18 de junio), resonaron con fuerza Viaje a Portugal y los cuadernos, donde "todo lo que se cuenta es verdad", aseguró la periodista, que esparció las ideas literarias del portugués.

"Él jamás usó las novelas para contar su vida, él era más ambicioso, escribía para contarse a él mismo y así comprender el mundo", prosiguió la viuda, que recordó que el escritor no dejó la pluma hasta los dos últimos meses de vida.

La relación de Saramago con las islas la recordó el profesor de la Universitat de les Illes Balears Perfecto Cuadrado. En 1994 visitó la isla. Su actividad fue intensa: dio dos conferencias (una por la mañana y otra por la tarde) y grabó una entrevista de media hora para Sa Nostra. Dejó constancia del almuerzo en Valldemossa en Cuadernos de Lanzarote. Chopin, George Sand y Sissi Emperatriz hilvanan la página que dedicó a la isla. En 2004 tocó tierras menorquinas y en 2009 tenía cita con Formentor, pero la enfermedad le alejó de las Converses, y en 2010 ya fue la muerte, "que si no fuera tan poco inteligente [la muerte] José estaría aquí hoy [ayer]", deseó su viuda.