El Consell hará una inspección en la Fundación Bartolomé March para comprobar si el belén napolitano expuesto está completo. El departamento de Patrimonio de la institución ha decidido tomar cartas en el asunto ante la ausencia el pasado mes de diciembre de los Reyes Magos y un buen número de ángeles en el nacimiento del siglo XVIII, valorado en 30 millones de euros.

Tras la noticia sobre la falta de piezas publicada por este diario, la Fundación colocó al cabo de varios días a los Reyes alegando que estaban siendo restaurados en Madrid. Pese a ello, el Consell enviará una carta a la familia March, propietaria del nacimiento, para convenir los días de la inspección en un plazo de medio mes. "Tenemos que ir a examinar el belén porque ni siquiera a nosotros [Consell], que somos los responsables de los bienes patrimoniales de la isla, nos constaba que se estuvieran restaurando los Reyes. Si los técnicos valoran que faltan elementos, expedientaremos a los herederos de Bartolomé March", declaró el director insular de Patrimonio, Biel Cerdà. La legislación vigente sobre patrimonio obliga a que en cuanto cualquier bien protegido –el belén fue declarado Bien de Interés Cultural en 2001– vaya a ser restaurado o movilizado, los propietarios deberán informar sobre ello a la institución competente en Patrimonio.

El punto de partida para cotejar la ausencia o no de piezas en el belén es un inventario que la historiadora Elvira González realizó en tres días a petición de la belenista Leticia Arbeteta, quien fuera comisaria de la exposición del nacimiento en la Fundación. Un inventario que contabiliza 554 piezas, cuando en la página web de la propia Fundación se habla de cerca de 2.000. "Lo elaboré hace siete u ocho años, cuando el belén se cambió de sitio y el director de la Fundación era Basilio Baltasar. Leticia exigió un inventario ante el traslado para así controlar las piezas. Y me dieron unos tres días para hacerlo. Por eso en el apartado de objetos, sobre todo los del mercado, no pude contabilizar las plantas, platito por platito o alimento por alimento. No me dieron tiempo", señala González, quien también reconoce que no le entregaron ningún inventario anterior, por lo que se supone que no existía ninguno, "algo sospechoso también".

Según dicho inventario, al que ha tenido acceso este rotativo, el belén consta de 332 figuras humanas valoradas en 24,1 millones de euros. La más cara en la tasación es el Niño Jesús de 16x6 centímetros, en barro cocido policromado y pasta vítrea, y con un halo de ráfagas de plata. Su precio: 150.000 euros. 119 mamíferos, 50 aves, 1 reptil y 52 objetos constituyen el resto del nacimiento.

La presunta desaparición de piezas en el Palau March tiene antecedentes. En 2007, el belén viajó al Palacio Real para mostrarse en Madrid. Cuando las figuritas volvieron a Mallorca, este diario ya adelantó que Javier Chico de Guzmán March, nieto de Bartolomé March, dirigió al actual presidente de la Fundación, Luis Alberto Salazar-Simpson, una carta en la que demandaba información acerca de la partida del conjunto napolitano hacia la capital: "Me gustaría saber, llegados a estos extremos, dónse se encuentran todas y cada una de las piezas y figuras del belén". Y ahondó aún más en la cuestión del número de elementos del nacimiento. "No sé cuántas piezas habrá cuando se vuelva a exponer en Palma", concluyó.