Fernando Trueba estrena el próximo viernes 'El baile de la Victoria', película seleccionada para representar a España en los Óscar en 2010. A la espera de la respuesta del público, que afronta como un "abrazo" y no como "un examen importante", el director que ya logró la preciada estatuilla con 'Belle Époque' dijo que "soñar no cuesta" y que "todo puede pasar" de cara a los premios de la Academia de Hollywood. "También me haría ilusión el Nobel de la Paz o el de Literatura", bromeó.

Ayer se confirmaba que en la categoría de mejor película de habla no inglesa los encargados de entregar el Óscar serán Pedro Almodóvar y Quentin Tarantino. Trueba, en esta línea, señaló, durante una rueda de prensa hoy en Madrid, que "si se da el supuesto" de tener que subir al escenario del Kodak Theatre el próximo 7 de marzo a recoger la estatuilla dorada, espera "no tener que forcejear con Almodóvar".

Trueba, que estuvo acompañado de las actrices Ariadna Gil y Miranda Bodenhöfer y del joven actor Abel Ayala (que completan el reparto de la cinta junto a Ricardo Darín), también se refirió a las palabras de ayer del presidente de la Academia de Cine, Álex de la Iglesia, quien comunicó al Rey que el cine español "corre un serio peligro".

"Yo le pediría al Rey que hipoteque el Palacio y haría la siguiente película", subrayó el director, quien consideró que el presupuesto no es lo importante y que "hay que hacer películas con o sin dinero, pequeñas, medianas o grandes".

Sobre si el listón del cine español está muy alto, tras los éxitos de público, primero de 'Ágora', de Alejandro Amenábar, y después de 'Celda 211', de Daniel Monzón, Trueba precisó que tras "el momento de dificultades" que ha pasado el cine español era una gran noticia. "Lo importante es que la gente va al cine y que gusta, que las películas funcionan", detalló un director que no se considera competitivo.

"Lo triste es cuando miras la cartelera y no hay ninguna película que te apetezca ver", dijo, recordando que le gusta ir al cine "en rebaño". "Ir al cine es algo maravilloso", precisó, matizando que, no obstante, está "tan tarado" que no sabe ni lo que cuesta una entrada de cine.

Sobre las críticas negativas que tuvo 'El baile de la Victoria' en el Festival de San Sebastián, consideró que ahora espera que llegue al público. "El único examen importante se hace cuando han pasado 25 años. Hay que dejar pasar ese tiempo, porque valorar algo tan reciente es difícil", dijo, negando que 'El baile de la Victoria' sea una película "poco española".

"España está llena de gente de todos los lugares y es hora de que las películas reflejen eso. Vivimos en un mundo nuevo, no hay fronteras y hay que hacer un cine transnacional", aseveró un realizador que ha hecho películas en Brasil, EEUU, Chile o Francia. "Soy un ciudadano del mundo y la película refleja el mundo en el que vivimos", precisó.

'El baile de la Victoria', rodada en Chile y basada en la novela de Antonio Skármeta (el guión lo firman también Trueba y su hijo Jonás), cuenta con actores españoles, argentinos, brasileños o cubanos, y narra la historia de Vergara Grey (Darín) un preso al que amnistían y al salir de la cárcel comprueba que la vida ha cambiado. Su mujer (Gil) se ha vuelto a casar y su hijo se aleja cada vez más.

Vergara Grey, un reputado ladrón de cajas fuertes, encontrará en el joven Ángel Santiago (Ayala), también recién salido de prisión, una ilusión. El chico se enamora de una joven bailarina muda, Victoria (Bodenhöfer), y persigue al conocido atracador para dar el golpe del siglo.

Ariadna Gil hace un papel muy breve pero "intenso". Es Teresa, la ex mujer de Vergara Grey. "Quería más porque es un personaje con poco tiempo en la película pero muy importante en la historia", consideró la actriz, quien detalló que la mujer a la que encarna ha tenido "una gran historia" con el personaje de Darín.

"Vergara Grey cree que el tiempo se ha parado o al menos lo desea. Pero sale de la cárcel y ve que todo es diferente, lo que rompe su vida y tiene que empezar otra vez. En Ángel Santiago encuentra a alguien perdido como él", opinó Gil, quien destacó la facilidad del actor argentino para llevar todo al humor.

"Contrataría a Ricardo, que es un súper actor, hasta en películas en las que no tenga que trabajar. Me lo llevaría a casa, porque tiene algo muy importante: es una persona que hace reír y eso es salud, alarga la vida. Le voy a hacer una estatua ecuestre", bromeó, por su parte, el director.