Unas 600 librerías colocarán sus paradas en las calles para acercar los libros al público, una cifra, que, según han explicado a Efe fuentes del Gremio de Libreros, se mantiene en la línea de años anteriores.

Como cada año, entre las novedades editoriales que se disputan el favor de los lectores figuran las obras de los llamados autores mediáticos, que conviven con las de los escritores de corte más tradicional.

Ruiz Zafón recogerá el testigo que ha dejado Ildefonso Falcones, fenómeno editorial de los últimos dos años con su novela histórica "La Catedral del Mar", y presumiblemente se volverá a situar entre los autores con más ventas en castellano con su última novela, "El juego del ángel", un puesto que ocupó también durante años con su antecesora, "La sombra del viento".

Además de Zafón, a quien se habilitará un espacio reservado sólo para firmar, también estarán atendiendo a sus lectores en las diferentes paradas distribuidas por la ciudad autores como Isabel Allende, Matilde Asensi, Juan José Millás, Juan Eslava Galán, Paul Preston, Donna Leon, Noah Gordon, Julia Navarro, Quim Monzó, Tracy Chevalier, y Josep Maria Espinás, el autor más veterano en estas lides.

La jornada festiva de libros y rosas que tradicionalmente llenan las calles de Barcelona y otras poblaciones catalanas con una riada de lectores, curiosos y turistas, será este año particularmente extranjera con la presencia de ilustres superventas internacionales como Noah Gordon, Isabel Allende, Donna Leon y Tracy Chevalier, además del historiador británico Paul Preston, el escritor italiano Alessandro Baricco o el argentino Jorge Bucay.

En castellano, al margen de Zafón, que este Sant Jordi jugará una liga aparte, las novelas mejor situadas para figurar en las listas de más vendidas de la jornada son "El asombroso viaje de Pomponio Flato", de Eduardo Mendoza, o "Saber perder", de David Trueba.

En la narrativa en catalán, junto a autores consagrados como Quim Monzó y sus "Mil cretinos" o Pep Coll y "Les senyoretes de Lourdes", llegan con fuerza a la cita del 23 de abril nuevos valores de la literatura catalana como la marroquí Najat El Hachmi y su "L'últim patriarca", último premio Ramon Llull, o Manuel Baixaulí, Melcior Comes, Edgar Cantero y Joan Miquel Oliver.

En el Año Rodoreda no faltan biografías, antologías de sus cuentos, un volumen en castellano que reúne dos de sus grandes novelas, "La plaza del diamante" y "La calle de las Camelias", así como su autobiografía reconstruida a partir de elementos autobiográficos de su obra periodística y de entrevistas que concedió al final de su vida.

Las estanterías estarán también repletas de libros memorialísticos o biográficos de personalidades relevantes de la cultura y la política de la segunda mitad del siglo XX, como la biografía del académico Martín de Riquer, la memorias de Josep Benet, Narcís Serra, Jordi Pujol, la biografía de Josep Solé Barberà, Josep María Espinàs y Pasqual Maragall o el dietario de 1973 de Josep Maria Castellet.

Entre los autores mediáticos, que habitualmente publican un libro destinado al "público Sant Jordi" figuran los televisivos Andreu Buenafuente, Toni Soler, Manel Fuentes, Roger de Gracia o Àngel Casas.