El alemán Horst Rippert, de 88 años, ha reconocido ser el autor de los disparos que abatieron el avión que dirigía el literato francés Antoine de Saint-Exupéry en 1944. El hombre así lo declaró al diario La Provence, que publicó ayer un trabajo de investigación al respecto llevado a cabo por dos franceses: un submarinista y un experto en búsqueda de aviones perdidos durante la guerra.

Saint-Exupéry despegó el 31 de julio de 1944 de su base en la isla de Córcega para una misión de reconocimiento a bordo de un avión Lightning P38, pero nunca regresó. En 1998 un pescador halló entre sus redes una pulsera que perteneció al autor de El Principito, y seis años más tarde fueron encontrados restos del avión frente a las costas de Marsella pero no fue aclarado el caso. Todavía hoy, su cadáver no ha sido encontrado.

"Pueden dejar de buscar. Fui yo quien abatió a Saint-Exupéry", dijo Rippert cuando fue localizado por los investigadores franceses. El piloto alemán llevaba dos semanas de servicio en la costa sur de Francia cuando en la mañana del 31 de julio de 1944 identificó un Lightning 38 y se dirigió hacia el aparato y le alcanzó con varios impactos, tras lo cual vio que caía sobre las aguas, pero no se percató de qué había ocurrido con el piloto.