El Mirandés volvió ayer a los entrenamientos tras una jornada de descanso con una intención clara: "Nos debemos a este club, sabemos que estamos descendidos, pero eso no quita que el domingo salgamos a ganar, queremos dar esa alegría que se merece la afición y acabar con una buena imagen". Esa es la intención al menos de Rúper, centrocampista del conjunto burgalés que confesó que buscarán una victoria ante el conjunto de Sergi Barjuan para acabar con buen sabor de boca la temporada. Un mensaje muy parecido al que expresó Gorka Kijera tras el entrenamiento matinal que realizó la plantilla. "El equipo no ha dado el 100% de calidad que podía dar y me incluyo, pero ahora nos debemos a nuestra afición, debemos dar las gracias porque aún estando muertos seguían apoyándonos y hay que conseguir la victoria", relataba el defensa del próximo rival del Mallorca.