El técnico del Almería, Luis Miguel Ramis, comparó ayer a su equipo con un enfermo que va a Mallorca para "abandonar la UVI", ya que estaba "en coma", fue a la Unidad de Vigilancia Intensiva y ahora quiere "pasar a planta". "Todavía estaremos en el hospital, pero mejor que antes y eso se consigue partido a partido, no pensando de dos en dos, de tres en tres o de cuatro en cuatro", señaló ayer Ramis sobre el estado de su equipo.
Comentó que, al igual que sus próximos rivales, llevan semanas "con finales y con partidos muy importantes y muy decisivos" como el que los enfrentará mañana al Mallorca, cita que calificó de "igual de importante para los dos". "El Mallorca tiene buenos conceptos de fútbol que Sergi ha intentado trasladar a sus jugadores", una plantilla "extraordinariamente buena, de las que a principio de temporada piensas que no puede pasar por este tipo de situaciones", pero "la realidad es que está en la parte baja" como los almerienses.
"Es un equipo que, si lo dejas maniobrar, es capaz de mandar, que es lo que queremos hacer nosotros muchas veces. Será un partido extremadamente competido, complicado y con un rival fuerte y que lleva seis de los últimos nueve puntos", explicó.
