Tras su buen partido en La Romareda, Lago volvió a ser una de la piezas claves del Real Mallorca ante el Córdoba. El delantero costamarfileño logró anotar el tanto del conjunto bermellón. Sergi le entregó, de inicio, la responsabilidad de dirigir el ataque rojillo y, pese a que durante muchos minutos estuvo desaparecido, fue de los futbolistas que más luchó sobre el césped de Son Moix. En el minuto 59 del encuentro, cometió un gran error al lanzar por los aires un centro de Angeliño que podría haberles dado la victoria. Se mostró ambicioso y contrastó con la actitud de la mayoría de futbolistas del plantel. Con la entrada de Lekic, pasó al extremo donde ganó algo de protagonismo en los últimos minutos. Se encontró muy solo arriba, con el planteamiento inicial de Barjuan.