La jornada del sábado se cerró con cierto aire de optimismo para el Mallorca, ya que el empate del Rayo Vallecano y la derrota del Alcorcón le han permitido recortar un punto su diferencia con el primer equipo situado fuera de la zona de descenso a la Segunda División B.

El Rayo Vallecano, con 33 puntos, marca esa posición que da la permanencia, aunque empatado a puntos con el Alcorcón, equipo que con la derrota de ayer en Almería se mete de lleno en un lodazal que se complica tras el triunfo, precisamente, del conjunto andaluz y de un Nàstic de Tarragona que dio la sorpresa en su visita a Valladolid.

De los que no jugaron ayer, uno preocupa, y mucho, al Mallorca. Se trata del Mirandés, que recibe esta tarde al Huesca -equipo que pelea por estar en la fase de ascenso-y cuyo resultado puede minar la moral de los rojillos al término de esta jornada 31 si consigue la victoria, ya que el conjunto burgalés sumaría entonces 32 puntos y superaría al equipo de Javier Olaizola en la clasificación, dejando a los mallorquinistas como colistas.

Del esto de la jornada también interesarían pinchazos del Córdoba, Zaragoza o UCAM Murcia, equipos situados por encima del Mallorca y que de no ganar aún se mantendrían a tiro de los rojillos, a quienes les interesa por el momento que la zona caliente de la tabla esté ocupada por el mayor número de equipos posible.