Javier Olaizola ha recuperado para la causa a un central notable que puede ser muy aprovechable en este último tramo de la competición. La línea de cinco defensas abrió las puertas del once a Ansotegi hace tres semanas. El vasco convenció y desde entonces se ha mantenido en el equipo titular. También ayer, pese a que Olaizola volvió a echar mano del 4-4-2.

Ansotegi aporta un liderazgo que todavía no está al alcance de futbolistas como Yuste o Raíllo, más jóvenes y menos apasionados. Al vasco le sobran galones y no deja de dar instrucciones durante todo el partido. Pese a su edad conserva una buena punta de velocidad para salir al corte y mantuvo a raya a Samu Saiz y Melero. Pero es, sobre todo, uno de esos pocos jugadores con oficio con los que puede contar Olaizola.