El Mallorca B sacó una gran rentabilidad a su prácticamente única ocasión del partido. Y es que los palmesanos se impusieron por la mínima que les permite alejarse de la zona peligrosa de la clasificación. El Llagostera, por su parte, dispuso de muchas ocasiones de gol pero no tuvo su día en ataque y acabó pagándolo muy caro.

Los primeros minutos estuvieron protagonizados por una gran intensidad en el juego, de mucha lucha, entre dos equipos que buscaban la victoria. Sin embargo, ninguno fue capaz de generar ocasiones de peligro en la portería rival. La primera ocasión llegó en el minuto 23 cuando una combinación entre Rubén y Manu Gavilán estuvo a punto de ser el primer tanto del encuentro pero Valens, en dos tiempos, detuvo. Los catalanes siguieron insistiendo y en el minuto 35, Rubén Martínez puso inaugurar el marcador.

Ya en la recta final de la primera parte, el Llagostera pidió penalti en una falta dentro del área palmesana de Antoine a Manu Gavilán, pero el colegiado dejó seguir el partido. Y antes del descanso, el mismo Gavilán tuvo la mejor ocasión de la primera parte en un remate de volea pero la pelota salió a la derecha de Valens.

La segunda mitad empezó con un remate al palo de Gavilán, el más activo con diferencia en los locales, con Valens ya batido ya que no se movió. Se cumplía el minuto 48. Se envalentonaron los blaugrana y Manel estuvo cerca del gol. Y la constancia local tuvo premio cuando el colegiado señaló un claro penalti en el minuto 56. Sin embargo, Marc Martínez falló desde los once metros.

La mejor ocasión del filial rojillo se produjo en el minuto 75 cuando Cedric, totalmente solo, puso a prueba los reflejos de Moragón, que detuvo con dificultades. Fue el preámbulo al tanto del filial, cuando un minuto más tarde y en la segunda aproximación del Mallorca B, Caye definió perfectamente para abrir el marcador. Máxima eficacia de los hombres de Pepe Gálvez en el Municipal Palamós-Costa Brava.

Los de Oriol Alsina tuvieron que arriesgar mucho más en busca del empate. En el minuto 78 Rafa Jordà pudo empatar pero no pudo rematar de cabeza en condiciones desde el punto de penalti. En tiempo añadido, Rafa Jordà dispuso de la última oportunidad para cambiar el signo del partido pero envió el balón rozando la escuadra.

Al final meritorio triunfo del Mallorca B que, pese a marcar en la única ocasión que tuvo, superó con nota un complicado encuentro al que llegó con numerosas bajas. Ahora el filial se sitúa en una zona tranquila en la tabla.