Un Real Mallorca muy optimista sobre sus posibilidades visita esta mañana el Martínez Valero para medirse a un Elche que, como los bermellones, lleva tiempo buscando ese punto de inflexión que le catapulte a la parte alta de la tabla.
El bloque de Fernando Vázquez esgrime una buena racha de resultados -cinco partidos sin conocer la derrota- y un juego que a rachas es muy digno para confiar en volver a Mallorca con los tres puntos. Será difícil repetir lo del Arcángel hace dos semanas, cuando los bermellones conquistaron su primer triunfo a domicilio del curso practicando un fútbol de mínimos. La flauta no suele sonar dos veces seguidas, por lo que tendrán que trabajárselo más.
Vázquez se ha desatado y en la previa apuntó al ascenso directo como objetivo del Mallorca. Mucha confianza debe tener en un equipo que no hace tanto se quemaba en la parte baja de la clasificación y que se ha quedado a medias en su intento de remontada. Elche ofrece una gran oportunidad para que los rojillos ratifiquen las palabras de su entrenador y demuestren que forman un bloque triunfador. De momento la realidad dice que el grupo se desinfla cuando juega lejos de Son Moix.
Al Mallorca todavía le faltan cosas para posicionarse arriba. Por ejemplo, concentración defensiva. Una flaqueza inesperada ahora que había encontrado en Brandon una magnífica solución para combatir la sequía goleadora del inicio.
Preocupa esa inconsistencia atrás de un equipo que ha encajado seis goles en los últimos cuatro partidos y que se presenta en el Martínez Valero sin sus dos laterales titulares. Campabadal se recupera de una lesión y Oriol cumple un partido de sanción. Company se desplazará a la izquierda, mientras que el carril diestro será previsiblemente para Pleguezuelo, una de las apuestas estivales de Recio por la juventud que apenas ha jugado. Alberto López ha entrado en su primera convocatoria de la temporada, pero aguardará en el banquillo.
También el Elche lamenta la baja de Nino, autor de cinco goles este curso y referencia en la parcela ofensiva. Guillermo tomará el relevo del veterano delantero, que cumplirá un partido de sanción. Alberto Toril tiene trabajo para equilibrar un equipo que rompe todas las estadísticas: es el que más goles marca y el que más encaja. Terreno abonado para Brandon, principal valedor de un Mallorca atascado en la zona templada de la tabla e incapaz de enlazar dos victorias que le destaquen.
Vázquez cumplirá el primero de los dos partidos de sanción por su expulsión contra el Sevilla Atlético. El gallego verá el partido desde una cabina del Martínez Valero, pero ya ha anunciado que buscará la manera de comunicarse con su ayudante Óscar Bruzón para dirigir al equipo.
